CAROLINA DEL NORTE.- El domingo pasado, un tiburón atacó a una adolescente de 17 años que estaba bañándose en la playa del parque Fort Macon, Cartaret.
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Tras el ataque, Paige Winter tuvo que someterse a una intervención en la que perdió una de sus piernas, algunos dedos de las manos y sufrió lesiones en el pelvis. La joven sobrevivió de “milagro”, pues su padre estaba con ella y golpeó al tiburón para que la liberara.
Tras recibir la llamada de emergencias, los bomberos y paramédicos llegaron al lugar y trasladaron a la adolescente en helicóptero hasta el hospital Cartaret Health Care.
“Su familia quiere expresar su aprecio a los socorristas que la atendieron, a las personas que estaban en la playa y que la ayudaron, y a su padre que le salvó la vida”, comunicó el Centro Médico Vidant de Greenville luego de indicar que la joven está “en buenas condiciones y recibiendo excelentes cuidados”.
Comparten su estado de salud
Por su parte, los familiares de la adolescente informaron en Facebook sobre su estado de salud. La abuela dijo que su nieta “continúa viva pero perdió una pierna”. Mientras que la madre, Marcy Winter, escribió: “Paige ya salió de la cirugía y está despierta. Quiere que todo el mundo sepa que los tiburones todavía la parecen buenos”, escribió.
Un temple inquebrantable
El hospital recalcó que Paige, a pesar del incidente, seguirá defendiendo la vida marina.
Tras las intervenciones, fue la propia Paige quien habló en un comunicado. “Aunque tengo gran cantidad de heridas, que incluyen una pierna amputada y daños en las manos, estaré bien”.
“Sé que tengo un largo camino por recorrer, que incluye más cirugías. Continuaré siendo positiva y me sentiré agradecida porque podría haber sido peor”, concluyó.
.- Con información de Infobae