PROGRESO.- Previo al nuevo cierre temporal de las playas de Yucatán, las autoridades municipales del puerto de Progreso aplicaron este domingo algunas medidas sanitarias preventivas a la entrada a la ciudad, pero en el malecón turístico los visitantes olvidaron los protocolos.
De nueva cuenta, el puerto de Progreso fue el principal atractivo para el turismo nacional, internacional y para las familias yucatecas que acudieron en menor cantidad que la semana pasada, pero con una afluencia atípica para esta temporada invernal.












Se suspendió el Carnaval
Las autoridades municipales de Progreso suspendieron el Carnaval 2021 que debía de realizarse del 10 al 17 de febrero y la Secretaría de Salud estatal dispuso el cierre de la playa a partir de este jueves 4 hasta el miércoles 17, ante el aumento de los contagios de coronavirus.
Desde las 9 de la mañana y hasta las 6 de la tarde, la Policía Municipal de Progreso instaló un retén sanitario a un kilómetro del distribuidor vial del puerto.
Dos agentes, un hombre y una mujer, rociaron líquido desinfectante sobre los vehículos y motocicletas que entraron al puerto. Quienes recibieron el baño completo del líquido esterilizador fueron los motociclistas.
Esfuerzos en vano
Esta fue una de las nuevas tareas que impulsa la autoridad municipal para tratar de contener los contagios, pero todo el esfuerzo se perdió en el corredor de la playa donde están instaladas palapas, sillas de descanso, mesas y sillas comunitarios, casa campañas o simplemente se instalaron los grupos de amigos y familiares para disfrutar de la agradable brisa marina.
Ante el anuncio del cierre de la playa, al menos dos personas que estuvieron en el malecón informaron que fueron a festejar su cumpleaños antes de que prohíban el paso.
Saúl llegó a las 8 de la mañana con su compañera porque a esa hora hay poca gente y pretendía retirarse a las 2 de la tarde cuando aumente la afluencia. Ingeniosamente, aprovechó un chal de su compañera y dos pedazos de madera para improvisar una casa campaña.
Otra que festejó su cumpleaños a la orilla del mar con su esposo, su madre y su hija fue Ivette M.G. Cada cumpleaños lo festeja en la playa porque adora el mar: "Amo la playa, el sol, el mar, la arena y el ceviche", dijo.
"No quiero que cierren la playa, es un lugar donde se distrae la gente en forma gratuita", subrayó. "Yo no tengo miedo al covid, me cuido. Lo que si está bien es la cancelación del carnaval porque viene muchísima gente, allí si hay aglomeración".
El buen clima que prevaleció durante el día atrajo a cientos de personas, principalmente turistas nacionales y algunos turistas internacionales.