Las restricciones en las playas yucatecas no detuvieron a cientos de bañistas que ocuparon los puertos de Telchac, San Crisanto y Chabihau, en donde no hubo vigilancia.
En Telchac Puerto, las cintas colocadas en el muelle quedaron como adorno para los paseantes, pues usaron las playas alternas del puerto para acampar y meterse al mar. Cientos de bañistas aprovecharon el clima y se trasladaron desde Progreso.








El alcalde Alfredo Marrufo Díaz anunció el pasado miércoles la restricción de los accesos a la playa, muelle y espacios públicos no esenciales de este puerto. Sin embargo, no se le pudo contactar este fin de semana ante la llegada de cientos de visitantes. Ni él ni los once policías municipales, incluido el director de la corporación, lograron detener el ingreso al mar de los paseantes.
En San Crisanto
En San Crisanto, comisaria porteña de Sinanché, la situación fue peor, sin policías municipales los bañistas aprovecharon para meter cervezas a las playas, así como motos acuáticas.
Entre los visitantes hubo también menores de edad y personas de la tercera edad que ocuparon sus casas veraniegas este fin de semana.
Cabe mencionar que el alcalde Felipe de Jesús Rojas Escalante no aplicó medidas sanitarias en esta comisaria porteña.
En Chabihau
En Chabihau, comisaría de Yobaín, la situación fue similar a las anteriores, familias enteras y personas de todas las edades llegaron a este puerto para disfrutar del mar.
En los casi 30 kilómetros de playas que incluyen estos tres puertos no hubo vigilancia estatal ni municipal. Algunos visitantes dejaron bolsas con basura, botellas de cerveza y cubrebocas tirados en las playas.