El temor existía, pues prometerte algo no es sinónimo de cumplirlo, sobretodo teniendo enfrente rivales que quieren lo mismo que tú.
Lino Montes se atrevió a decirlo: quería una medalla en el Campeonato Mundial de Mayores. Y esa presea llegó, una plata que sabe a oro, histórica para él, para Yucatán, para Tekax y para México.
Fueron 167 kilogramos los que levantó Lino en Anaheim, California, y que le dieron la plata en el Mundial. Él la quería, la deseaba y la prometió, aunque nadie lo tomó muy en serio, no por su calidad de deportista —ir a unos Juegos Olímpicos no es de a gratis—, sino por lo complicado que es tenerla en un deporte en el cual tienes que estar al 100% si deseas encontrar el éxito.
En su visita al Diario, Lino nos platicó además de su actualidad. No deja de entrenar, eso nunca, pues quiere otra medalla importante en 2018, pero tampoco deja de lado el tema familiar, sobretodo con su pareja e hijos, que lo tratan de aprovechar al máximo durante el periodo “vacacional”.
Sin pensarlo, Lino pide más apoyo a su deporte. El oriundo de Tekax no niega que la halterofilia no es tan seguida, pero con la calidad de pesistas que se encuentran en todo el estado, el apoyo debe ser total.
Con el próximo año en puerta, el yucateco piensa en grande. Quiere repetir una historia que empezó hace tiempo, prometerse algo y lograrlo debe volverse una constante. El éxito, cree Lino, primero debe quererse.
“La vida es una escuela, todos los días aprendes algo nuevo y aprendes más de las derrotas”
Lino Montes Góngora
Levantamiento de pesas