En el baile de su presentación en sociedad

Minutos antes de iniciarse el año 2018, Valentina Ancona Guzmán fue proclamada reina del Club Campestre, en elegante velada en la que, junto con otras 27 señoritas, hizo su debut en sociedad.

El Gran Salón “José Trinidad Molina Castellanos” —con una decoración en la que predominaron el dorado y plateado— fue el marco en que las jóvenes se presentaron ante una concurrencia de 1,320 personas.

A las 10:36 del domingo 31 dio comienzo la ceremonia protocolaria, con la aparición de Helena Molina Roche, quien recorrió por última vez el escenario como soberana 2017, del brazo de su padre, Eduardo José Molina Reyes, mientras se escuchaban las notas del tema “Fantasy in the Sky”.

Helena lució un vestido de escote “V” y corte princesa confeccionado en tul italiano y bordado a mano con aplicaciones de encaje, cristales y pedrería en tono marsala, diseño de Alexei Quintal.

En su oportunidad tomó la palabra para dirigir un mensaje de despedida: “Hoy termina un año excepcional, donde tuve oportunidad y el privilegio de representar a nuestro querido Club Campestre. Fue un año lleno de actividades y convivencia, el cual sin duda significa un crecimiento y una experiencia única en mi vida”.

Agradeció a su familia, especialmente a sus padres, Eduardo José Molina Reyes y Alexandra Beatriz Roche de Molina, quienes la ayudaron a “hacer de este año una maravillosa experiencia”.

Obra altruista

Helena extendió asimismo un agradecimiento al comité directivo del club por su apoyo, particularmente para la actividad “Pintando un sueño”, que se realizó a beneficio de la población necesitada, y a los colaboradores en general del Campestre.

A la reina entrante le dijo: “Hoy inicias un ciclo diferente que estoy segura disfrutarás al máximo y sin duda se pasará en un abrir y cerrar de ojos. Te deseo lo mejor y, lo más importante, gózalo, que pocas personas tienen este privilegio”.

Sergio Cruz Ruiz, gerente del club, quien fungió como maestro de ceremonias, presentó enseguida a las debutantes, cuando el reloj ya marcaba las 10:42.

Entre las 28 señoritas estuvieron las gemelas María Alexia y Marielle Palomeque Marrufo, acontecimiento poco común que motivó que su padre, José Rafael Palomeque Roche, después de presentar a la primera de ellas, retornara al escenario para acompañar a la segunda en el desfile por la pista. En el baile se les unió su primo Arturo Palomeque Fitzmaurice.

Las debutantes desfilaron con sus padres, excepto una de ellas, que lo hizo del brazo de su hermano.

La última en ser presentada fue Valentina Ancona Guzmán, quien apareció del brazo de su padre, Eduardo Ancona Cámara, con quien recorrió la pista mientras se escuchaban como fondo musical las notas de la “Suite del Expreso Polar”.

Valentina lució un vestido de corte princesa con gran falda y volantes en cascada confeccionado en vaporoso tul, cuerpo de escote palabra de honor elaborado con encaje y aplicaciones de hilo bordado y pedrería. Complementó su atuendo con corona de perlas y cristales de Swarovski y joyas de familia.

Símbolo del reinado

El presidente del club, Arturo Millet Molina, le entregó una pulsera como símbolo de su reinado 2018. El ingeniero Alejandro Esquivel Mimenza, vocal de la sociedad, leyó a su vez el laudo de proclamación de la reina.

Luego del mensaje del presidente debía comenzar el baile, pero fue necesario hacer una pausa de unos minutos en la ceremonia pues una de las jóvenes tuvo un desvanecimiento, del que se recuperó rápidamente.

El tradicional baile se inició enseguida y concluyó a las 11:36.— Iris Ceballos Alvarado y Claudia Sierra Medina

 

Baile de debutantes Detalles

Un total de 28 jóvenes, entre ellas la reina, hizo su debut en el Club Campestre.

Tradición de soberanas

Valentina Ancona Guzmán representa la cuarta generación en su familia de soberanas del club. Así lo recuerda su abuela, María Eugenia Losa Seijo de Guzmán, quien fue reina en 1966.

Club Cocoteros

La lista de reinas de la familia se inició en 1944, con María Rosa Seijo Gómez de Losa. En 1990, María Eugenia Guzmán Losa de Ancona, madre de la actual soberana, fue la embajadora del Club Cocoteros.