El corazón es un órgano con una complejidad que es difícil de dibujar, pues recordemos que está conformado por un conjunto de aurículas, ventrículos, válvulas, venas y una aorta y pericardio. Además su forma real no es tan adorable como los ya conocidos dos semicírculos unidos en una punta de flecha hacia abajo: ♥.
Pero te has preguntado de dónde surge este dibujo utilizado universalmente para representa la figura del corazón y que tambiénes usadocomo expresión de amor, afecto y romance.
O quién lo inventó, pues poco tiene en común esa forma con el aspecto real del órgano encargado de bombear sangre por todo nuestro cuerpo.

¿Por qué dibujamos así el corazón?
El símbolo convencional del corazón que solemos dibujar, enviar o publicar en redes sociales curiosamente no se parece en nada al órgano vital que tenemos en el pecho. Pero esta forma sí estaría vinculada con el tema de las relaciones amorosas.
Y es que entre las distintas teorías que hay y, la historia que se cuenta sobre el origen del símbolo de corazón hay una que encajaría a la perfección.
Data de la antigua cultura grecorromana, donde los griegos y romanos utilizaron en casi todos los aspectos de la vida cotidiana una planta llamada Silphium. De hecho se dice que el uso de esta planta fue tan abusivo que acabaron por extinguirla antes de la caída del imperio romano, por lo que alrededor del año I d.C., había desaparecido por completo.

¿Una planta extinta le dio origen al símbolo del corazón?
De acuerdo con investigaciones la planta ya extinta, se usaba como medicamento (analgésico natural) y especia aromatizante (en perfumes y fragancias aromáticas).
Pero sobre todo como método anticonceptivo; algunos la han considerado como un antiguo precursor de la píldora abortiva o, incluso, de la pastilla del día después.
Los médicos de la época sugerían que el mejor procedimiento era empapar un algodón con la resina de la planta y crear con ella una especie de pastilla que las mujeres debían introducir por su vagina una vez al mes; si estaban embarazadas, la planta tendría un efecto abortivo, mientras que, si no lo estaban, causaría una infertilidad temporal en la mujer.

Por lo tanto, debido a que las hojas de esta planta también conocido como silfio —quese trataba de un vegetal de origen norteafricano y de aspecto similar al del hinojo— era utilizadascomo anticonceptivo, es que algunos sugieren su relación con el símbolo que ahora usamos para expresar amor.
Aunque en realidad, el peculiar dibujo del corazón más bien hace referencia al aspecto de las semillas de la planta silfio, mismas que quedaron impresas en unas monedas provenientes del antiguo territorio de Cirene (entre los siglos VI y III a.C.) identificado con Libia en la actualidad.
De igual modo el silfio estaba asociado al deseo y la libertad sexual, por lo que comenzó a relacionarse con la diosa Afrodita, diosa de la belleza, la sensualidad y el amor; por esa razón se fortaleció la idea de que la forma de las semillas de dicha planta está directamente ligada a la idea de amor y por supuesto, la representación del corazón.

Otras hipótesis sobre el origen del icono del corazón al que estamos acostumbrados hoy en día, señalan que su forma fue moldeada según:
- La anatomía humana, es decir, los pechos o los glúteos de la mujer.
- La forma de las hojas del nenúfar o la hiedra.
- El santo San Valentín usaba el símbolo para concertar matrimonios secretos.
Sin embargo todas estas teorías no están bien fundamentadas.
¿Quién inventó el símbolo o icono del corazón?
Quién inventó el ícono del corazón quizás sea una incógnita con muchas respuestas, pero cuándo se hizo tan popular este dibujo es algo más fácil de contestar, pues se dice que fue hasta la Edad Media en la que este símbolo empezó a ganar la popularidad de la que hoy goza hoy.

Pues se dice que el hecho de que el corazón se dibuje de esta forma es porque se parece mucho al corazón de la vaca.
Y es que hay que tener en cuenta que la forma del corazón de este animal era ampliamente conocido por la gente mientras que pocos habían visto uno humano; esto habría hecho que se empezara a dibujar de este modo por error.
Si bien, no hay ningún hecho que confirme 100% esta teoría, esta es ciertamente plausible.
¿Nunca se ha dibujado el corazón como realmente es?
En épocas aún más antiguas, la forma de representar el corazón era mucho más fidedigna a la realidad que la del periodo grecorromano. De hecho, jeroglíficos egipcios muestran que este pueblo tenía una visión más realista del órgano central.
¿Desde cuándo se representa el corazón con esa forma? Aquí la representación de un corazón con forma de vasija en un papiro egipcio (1300 – 1100 a.C.). pic.twitter.com/ATFtaLR1iy
— Javier Flores (@_Javier_Flores) February 11, 2021
En el antiguo Egipto (desde hace más de 5.000 años), los cuerpos se momificaban para conservarlos, este proceso les permitía ver el cuerpo por dentro y de esta forma, adquirían un conocimiento anatómico muy real.
El corazón era de los pocos órganos que dejaban dentro del cuerpo a la hora de momificarlo, ya que para la civilización egipcia el corazón era considerado el órgano en el que se encontraban tanto el alma como la mente humana.
La representación más popular del corazón en Egipto la encontramos en “El Juicio de Osiris”, una obra en la que se aprecia al dios Osiris pesando en una balanza el corazón de un difunto junto a la pluma de Maat (diosa de la verdad y la justicia).
En dicho obra el órgano aparece dibujado con un realismo destacable. Vale la pena mencionar que según las creencias egipcias, si la balanza se equilibraba, el corazón era puro y el fallecido merecía ser salvado; pero si pesaba más era devorado por Ammyt, un híbrido de animales muy temidos en el Nilo: hipopótamo, león y cocodrilo.

¿En qué órgano de nuestro cuerpo percibimos el amor?
Tenemos la idea de que el amor y otras emociones se albergan en el corazón, pero la realidad es que esas reacciones no se regulan allí sino en el cerebro, concretamente, en una parte del cerebro llamada amígdala.
A pesar de la percepción común sobre el estrecho vínculo entre el corazón y nuestros sentimientos, el amor y otras emociones no se regulan allí sino en el cerebro. Concretamente, en una parte del cerebro llamada amígdala.
Sin embargo, se cree que la idea de que el corazón aloja las emociones fuertes como el amor, es porque cuando nos emocionamos al ver a al ser amado o a quien nos gusta nuestro corazón tiende a latir más rápido.
Y somos más conscientes de ello, porque sentimos los latidos de dicho órgano; por otro lado, no somos realmente conscientes de lo que ocurre en nuestro cerebro.

*Con información de National Geographic, Billiken, Universidad Complutense Madrid y Mundo deportivo.
