TIZIMÍN.— Los convivios navideños en centros laborales ya sea públicos o privados así como las reuniones familiares, han iniciado, lo que significa un incremento en las ventas de los comercios establecidos de ropa, calzado, joyería, perfumería entre otros.
Desde hace una semana que en el primer cuadro de la ciudad ha sido notoria la afluencia de personas en busca de sus estrenos para posadas, de la adquisición de regalos e incluso juguetes que los padres de familia están comprando tras la dispersión de los aguinaldos.
Los comerciantes tienen la confianza que a partir de este fin de semana se elevarán aún más las ventas sobre todo por que ya es la primera quincena de diciembre.
En las conocidas zapaterías, los encargados indican que las familias completas están llegando a surtirse con sandalias, tenis, botas entre otros, lo mismo que en los establecimientos de ropa y las tiendas departamentales donde la gente sale con bolsas llenas de artículos.
Hay tiendas de regalos donde los empleados indican que desde la semana pasada han estado vendiendo perfumes, bolsas de dama, gorras, billeteras, agendas que al instante se envuelven para los tradicionales intercambios de regalos.
Jorge Euan Cutis, empleado, de una papelería del centro dice que cada año se dedican a recibir juguetes para forrar por lo que esperan que en el transcurso de esta semana previo a la Navidad los padres de familia los visiten para ir preparando las envolturas.
Por otra parte dice que todavía siguen las familias comprando mangueras de luces, series de foquitos o árboles navideños pues hay gente que espera la primera quincena de diciembre para adquirirlo.
En los supermercados en vez de juguetes y artículos del hogar, han puesto en exhibición y a la vista, insumos alimenticios que suelen demandarse para la preparación de los platillos navideños, así como pavos congelados en diferentes pesos.
Otro de los sitios que han sido de mayor concurrencia en las últimas fecha e inclusive ya tienen reservaciones para los próximos días son los restaurantes pues en varios lugares ya han agendado espacios para las posadas.
El Centro incluso se ha vuelto un caos no solo por los trabajos del centro histórico, sino por el aumento de familias realizando sus compras y que saturan hasta los estacionamientos públicos y las calles del primer cuadro de Tizimín.— WENDY UCÁN CHAN