La Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 11 de febrero como el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia, reconociendo así el papel fundamental que desempeñan las mujeres en la comunidad científica y tecnológica.

A pesar de los avances significativos en la educación superior, las mujeres enfrentan obstáculos crecientes a medida que avanzan en sus carreras científicas. Según la UNESCO, aunque representan el 33% de todos los investigadores a nivel mundial, solo el 12% de los miembros de las academias científicas son mujeres.

Las investigadoras a menudo se enfrentan a carreras más cortas y menos remuneradas, con becas de investigación más modestas que sus colegas masculinos. Además, su trabajo está subrepresentado en revistas de alto impacto y a menudo se pasan por alto para promociones.

El Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia busca fortalecer los vínculos entre la ciencia, la política y la sociedad, y trazar estrategias para mejorar el presente y futuro de las mujeres y niñas en la ciencia. La igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y niñas son esenciales para el desarrollo económico mundial y el cumplimiento de los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Con el objetivo de lograr un acceso y participación plenos y equitativos de las mujeres y las niñas en la ciencia, las Naciones Unidas han designado, desde el año 2015, el 11 de febrero como el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia.