Dos altos ejecutivos de empresas que proveen de energía limpia a la Península de Yucatán expusieron las dificultades para expandir la distribución de este insumo vital para el desarrollo industrial del Estado.

La vicepresidenta de Asuntos Gubernamentales y Sustentabilidad de Engie México, Ana Laura Ludlow Echeverría, ofreció ayer una conferencia en el marco de la convención nacional de la Canacintra, donde reveló que en cuatro años de haber recibido la concesión de la Comisión Reguladora de Energía para surtir de gas natural a residencias, industrias y comercios, apenas lleva 100 clientes residenciales y 40 contratos con industrias y comercios, principalmente porque Yucatán no tiene la cultura del uso de gas natural domiciliario, por la oposición de algunos habitantes que creen que es un insumo inseguro y quizá por la oposición de las gaseras tradicionales que ven amenazado su mercado.

También reveló que todavía no inicia la construcción de la ampliación del ducto Mayakán para duplicar el volumen de la molécula en Yucatán porque hay un atraso en la edificación de las dos plantas generadoras de electricidad de la CFE, una en Mérida y otra de Valladolid, y aunque Engie firmó un convenio con la CFE y la empresa privada tiene los recursos para la construcción de esa red de ducto terrestre, que irá de Macuspana, Tabasco, a Valladolid, Yucatán, “no sabemos quién lo va a hacer”.

El obstáculo en la construcción del gasoducto

El atraso de la construcción del segundo ducto de Mayakán, que será de 700 kilómetros, impide un mayor crecimiento industrial de Yucatán porque el ducto actual, que se construyó hace 20 años, está al tope de su capacidad y solo manda 250 millones de pies cúbicos diarios de gas natural, principalmente para el consumo de las plantas de la CFE.

El otro ducto nuevo irá en paralelo con Mayakán I y duplicaría la capacidad actual de gas natural, lo que alentaría las inversiones y la llegada de industrias, ya que es un combustible más barato en comparación a los combustibles fósiles que hoy se usan.

Lo más preocupante, según mencionó la vicepresidenta de Engie, es que la empresa francesa tiene el compromiso de abastecer a 80,000 domicilios de Mérida, Kanasín, Umán, Progreso y Ucú. En los primeros 5 años Engie debe tener conectado en sus ductos de toma residencial a 16,000 usuarios y en los próximos 20 años incorporaría a los restantes. Si no cumple este objetivo, la CRE puede bajar las tarifas.

Beneficios de un gasoducto en Yucatán

En Yucatán tiene el apoyo y la voluntad de los gobiernos estatal y municipal de extender la red, pero los habitantes todavía no conocen los beneficios y que es un servicio de menor costo y muy seguro, en comparación con el gas licuado.

Engie diseña estrategias para infundir confianza en los habitantes y pronto va a involucrar a la academia para un plan de concientización con demostraciones reales, testimonios de usuarios satisfechos y una información más constante.

“La empresa proyecta invertir 1,400 millones de dólares para la ampliación del gasoducto Mayakán. Estamos pensando que se puede realizar en algún momento porque la capacidad del ducto actual ya llegó a su límite para seguir creciendo”, dijo.

“Esta demanda de mayor volumen es por el crecimiento industrial que tiene Yucatán. Engie quiere acompañar la estrategia de este Yucatán industrial y necesita aumentar la capacidad del gasoducto.

“ Firmamos un convenio con la CFE para que Engie amplíe el ducto marino hasta Coatzacoalcos y Dos Bocas, Tabasco. Se requiere de una infraestructura por tierra de Macuspana a Valladolid, es lo que se pretende desarrollar, serían 700 kilómetros de gasoducto nuevos. No podemos parar el actual Mayakán que ya funciona, no podemos dejar sin energía ni luz a la región”.

Recordó que Engie construyó un nuevo gasoducto de 16 kilómetros en 2020 que se llama Cuxtal 1, con lo cual conectaron el Mayakán con el sistema nacional de gasoductos y por ello aumentó el suministro de gas natural a Yucatán y ahora recibe en baja proporción gas natural importado, que es de mejor calidad.

Dijo que Engie lleva alrededor de 4,000 millones de pesos invertidos en infraestructura y el compromiso de la empresa es continuar desarrollando infraestructura para ampliar el abasto de esta energía limpia.

Energías limpias en Yucatán

Por su parte, Rodrigo Sánchez, director de Vive Energía Solar, afirmó que la Península de Yucatán tiene un enorme potencial para la generación de energía renovable por fuente solar y eólica, pero la falta de liberación de permisos de los proyectos registrados ante el CRE impide que se construya y aumente la producción de energía limpia.

“La península es una zona de crecimiento impresionante por la cercanía con Florida y Texas, hay una viabilidad importante para detonar la industria”, dijo.

“Es cien por ciento necesario construir las plantas de energía limpia y debe ir emparejado en incrementar la infraestructura de las redes de transmisión y distribución. “Explotar el potencial eólico y solar que tenemos sería prioritario para satisfacer la demanda y contribuir con la península para que siga creciendo económicamente. Sabemos que a nivel país, Quintana Roo y Yucatán tienen números positivos. Si le sumamos energía renovable vamos a detonas la industria y estará asegurado el crecimiento económico de la región”.

Dijo que el gobierno federal oculta el costo real de la generación de energía por medio de los subsidios, es cara la producción porque usa combustibles más caros y contaminantes y aun así no libera los permisos para construir infraestructura eléctrica y asegurar costos bajos a largo plazo.

“Lo que hace la política energética es para consumir combustibles fósiles que es más caro; hoy tienes plantas de generación en la península de 500 megawats o más, pero con consumo de diesel que es contaminante y está fuera de la realidad de los nuevos tiempos”, explicó.

“Hoy, si quiere venir una armadora de vehículos, pregunta si tienes acceso a gas natural y agua y pregunta de dónde viene la fuente de energía. Si es fósil, es difícil que se quede”.

También consideró que existe el riesgo que se dispare la tarifa eléctrica hasta un 119% porque el 70% de la energía se produce con combustibles fósiles. Si llegara a subir la tarifa, los empresarios crearían sus propias fuentes de generación para no continuar colonizados por la CFE, dijo.

Joaquín Orlando Chan Caamal, reportero de la Agencia Informativa Megamedia (AIM); es periodista desde 1987 y en 1993 ingresó a Diario de Yucatán, buque insignia de Grupo Megamedia. Escribe sobre el ámbito local y peninsular, especialmente contenidos sobre educación, economía, medio ambiente, sectores empresariales, sociedad y seguridad.