El orador huésped, Fidencio Briceño Chel con el alcalde Alejandro Ruz Castro (derecha) en la sesión solemne. Atrás, Víctor Hugo Lozano, líder del Congreso; María Fritz Sierra, secretaria de Gobierno; Carolina Canto Valdez, presidenta del Tribunal Superior, y la síndica Diana Canto Moreno
El orador huésped, Fidencio Briceño Chel con el alcalde Alejandro Ruz Castro (derecha) en la sesión solemne. Atrás, Víctor Hugo Lozano, líder del Congreso; María Fritz Sierra, secretaria de Gobierno; Carolina Canto Valdez, presidenta del Tribunal Superior, y la síndica Diana Canto Moreno
  • El orador huésped, Fidencio Briceño Chel con el alcalde Alejandro Ruz Castro (derecha) en la sesión solemne. Atrás, Víctor Hugo Lozano, líder del Congreso; María Fritz Sierra, secretaria de Gobierno; Carolina Canto Valdez, presidenta del Tribunal Superior, y la síndica Diana Canto Moreno
  • Cecilia Patrón Laviada, diputada federal y precandidata a la alcaldía, con el primer edil Alejandro Ruz durante las mañanitas a la ciudad

“Es muy importante no olvidar quiénes somos, de dónde venimos y cómo hemos crecido”, expresó ayer Fidencio Briceño Chel, orador invitado en la sesión solemne del Cabildo con motivo del 482o. aniversario de la fundación de Mérida.

“Solo así podremos decir que seguimos viviendo en una ciudad que muestra que con tolerancia, con el cuidado de nuestra cultura y el respeto a nuestra historia podremos escribir, podremos compartir y vivir nuevas historias”, indicó.

Por su parte, el alcalde Alejandro Ruz Castro resaltó que “a más de cuatro siglos de distancia hemos logrado que Mérida ocupe en el ámbito nacional e internacional un sitio privilegiado como una ciudad que basa su desarrollo y fortaleza en la participación ciudadana de sus habitantes”.

La sesión inició a las 18:26 horas y concluyó a las 19:16, con la ausencia de dos regidores, María Fernanda Vivas Sierra, y Oscar Medina Cruz, quienes justificaron su inasistencia. Acudieron representantes de los tres Poderes del Estado al acto celebrado en el auditorio “Silvio Zavala” del Olimpo.

Todas las regidoras asistieron con vestidos de color blanco y los ediles con guayaberas del mismo color. Entre los asistentes estuvieron exalcaldes, la exgobernadora Dulce María Sauri Riancho, la precandidata del PAN a la alcaldía, Cecilia Patrón Laviada, líderes empresariales, cónsules y representantes de otros sectores.

Valor a la lengua maya

Fidencio Briceño es doctor en Lingüística antropológica, autor de 20 libros y más de 100 artículos. Se ha dedicado a impartir talleres de mantenimiento lingüístico y ha recibido premios y reconocimientos nacionales y locales, como el “Pánfilo Novelo Martín”, que otorga cada año el Congreso del Estado. Es profesor e investigador de INAH.

Previo a su intervención se dio lectura al acta de la fundación de Mérida y a una remembranza del orador invitado.

Briceño Chel inició su discurso hablando en maya y haciendo gala de sus conocimientos lingüísticos. Inició con un análisis de lo que significa Mérida y ser meridano.

Recordó que Mérida fue fundada el 6 de enero de 1542 por Francisco de Montejo ‘El Mozo’, quien la nombró Mérida porque las antiguas edificaciones prehispánicas le recordaron a las ruinas romanas que se conservan en la ciudad homónima de Extremadura, España.

Afirmó que que antes de la llegada de los españoles este territorio era conocido por los mayas como T’ho, cuyo significado es “cinco cerros”, y tiempo atrás recibió el nombre de Ichcaanzihó, que quiere decir “cara del infinito”. Sobre los vestigios de dicho asentamiento maya fue fundada la ciudad.

El orador aprovechó la presencia de las autoridades estatales, municipales y líderes empresariales para hacer una petición:

“Más que nunca, hago un llamado para dar más y mejores espacios a la maayat’aan, la lengua maya, que todavía hoy podemos presumir como la variante lingüística más hablada en todo México de las 364 que forman parte de nuestra diversidad lingüística nacional”, precisó el orador huésped.

Espacios para la lengua

Recordó que al llegar a Mérida, a los 17 años, hace casi 40, había más espacios de uso de la lengua maya, pero también había sitios de exclusión, donde “mal miraban” si escuchaban a alguien hablarla. Por fortuna, indicó en su discurso, eso ya está cambiando.

“Aquí respiramos un aire de tranquilidad, escuchamos nuestras charlas con nuestro español aporreado, oímos canciones en maya, a veces se cantan canciones que ni se pensaba que fueran mayas como Ko’one’ex ko’one’ex paale’exen, sin siquiera pensar en menospreciarlas; hoy en día escuchamos rap en maya, poemas en maya y teatro en maya”, destacó.

Si la lengua maya forma parte de la historia local y de sus orígenes, preguntó “¿por qué avergonzarnos de ser mayas?, ¿por qué avergonzar a quienes no hablan ‘correctamente’ el español?, ¿por qué copiar palabras y acentos que nos son ajenos solo por querer parecerse al otro?”

“Creo que es la oportunidad de poner en alto nuestra identidad y presumirla, visibilizarla, ponerla al mismo nivel que otras lenguas del mundo y así ser verdaderamente incluyentes, inclusivos, con pleno respeto a la diversidad, pues por lo general defender lo maya y lo indígena nos contrapone al Estado, que busca homogenizarnos para construir una identidad nacional y al mismo tiempo nos folcloriza”, recalcó.

“Vayamos por el camino de la diversidad presumiendo nuestra mayanidad, nuestra identidad”, remarcó.

Mérida, en crecimiento

En su turno, el alcalde Alejandro Ruz afirmó que Mérida es una ciudad mestiza que ha aprendido de su historia y fue testigo de dramáticas transformaciones de su rostro maya con la llegada de los españoles.

“La historia de Mérida es la historia de la libertad y de la felicidad. De la comprensión del otro y sus necesidades. Es verdad que ha habido injusticia en los tiempos del henequén, explotación de las diversas manos de obra, independientemente de su origen que podrían ser chinos, coreanos, yaquis o mayas. Podrían ser esclavos o libaneses. Así pasa en todos los pueblos de la Tierra”, indicó el primer edil.

Manifestó que Mérida aprendió de las lecciones de su historia y ha entendido que no hay felicidad colectiva ni habrá paz excluyendo del desarrollo a unos de otros, separando a unos de otros, lastimando a unos en beneficio de otros.

“Mérida ha basado su crecimiento en las raíces y tradiciones que le dan sentido a su historia, pero sabiendo combinarla con la modernidad, la vanguardia y, ahora, con los adelantos tecnológicos que la distinguen. Ha aprendido, estamos aprendiendo a poner nuestra historia en sitios de revisión y de progreso. Cada época tiene sus deudas y deudores, y a veces se nos juntan deudores de otros tiempos”, puntualizó.

Destacó que se tiene que hacer en esta ciudad más por las comunidades hablantes de lenguas indígenas, más por mujeres, niñas y niños, por personas con capacidades diferentes, grupos vulnerables y necesitados.

“Garantizar que esta sociedad sigue viva es garantizar que todos tengamos las mismas oportunidades y ayudar a quienes tienen rezago para que no sigan viviendo así, que tengan todo el piso parejo”.

“Esto hace de Mérida una ciudad única, especial, de lo que todas y todos nos sentimos orgullosos, un orgullo que trasciende ideologías, colores o divisiones de cualquier tipo y nos hace permanecer juntos, aquí presentes, para honrarla y engrandecerla”, afirmó.

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David Domínguez Massa, reportero de la Agencia Informativa Megamedia- Tiene 41 años de trayectoria periodística, y es colaborador de Grupo Megamedia desde 2000. Premio Nacional de Periodismo en 2006,...