Hasta en un millón de metros cúbicos (m3) bimestrales aumenta la demanda de agua que distribuye la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán para Mérida en los lapsos enero- febrero y mayo-junio, pasando de 7.5 millones a 8.5 millones de metros cúbicos, en atención de 340 mil usuarios del servicio en la ciudad.
Carlos Francisco Castillo Sosa, director de la Japay, explicó en entrevista con el Diario que con la llegada de los meses más cálidos del año la demanda del servicio de agua potable se incrementa de forma considerable, de modo que la junta tiene que aplicar un intenso programa de mantenimiento de sus instalaciones, equipos y red de distribución entre octubre y diciembre del año inmediato anterior, que incluye sus cuatro plantas potabilizadoras, 21 cárcamos de bombeo y 189 cisternas ubicadas en la capital yucateca.
Además, dijo que la Japay es consciente de lo importante que se vuelve el suministro de agua en los días cálidos, de manera que su prioridad es garantizar el abasto continuo y suficiente para satisfacer la demanda y atender las necesidades de los usuarios.
Castillo Sosa recordó que históricamente el consumo de agua en Mérida para el bimestre enero-febrero ronda los 7.5 millones de metros cúbicos; para marzo-abril la demanda crece a 8 millones de metros cúbicos y para mayo-junio alcanza 8.5 millones de metros cúbicos.
“Los periodos vacacionales suelen aumentar la demanda de agua, mucha gente se queda en casa, los niños no van a la escuela, llenan sus albercas, piscinas o chapoteaderos para divertirse y mitigar el calor, el riego de los jardines en las casas aumenta en cantidad y frecuencia. El agua se vuelve un recurso más que apreciado, imprescindible”.
La red de bombeo y distribución de la Japay depende absolutamente de la energía eléctrica, cuando se presentan apagones o problemas con la electricidad, el sistema deja de operar y basta un apagón de 10 minutos, para que entre cuatro y seis horas el sistema recupere el pleno de presurización.
Reparaciones
Carlos Castillo Sosa, director de la Japay, dijo que la infraestructura no ha crecido, pero se han centrado en el mantenimiento y recuperación de los caudales que se desperdician por fugas en la red, lo que se traduce en millones de litros que se aprovechan.
Y ahora con la contaminación de la MEGA MARRANERA que ya bendijo a mano bajita Sheinbaum, los cabezones duenos acabarán más rápido con el agua CONTAMINANDOLA