CIUDAD DE MÉXICO (EFE).— La candidata opositora a la Presidencia, Xóchitl Gálvez, recibió ayer el bastón de mando de un pueblo originario del Estado de México, al tiempo que se comprometió a atender con recursos e infraestructura a los pueblos indígenas de los 32 estados del país y no solo a los del Sureste, como la actual administración del presidente López Obrador.
“¡Ya basta! No todo el dinero se va a ir al sur del país. Sí, vamos a apoyar al Sur, pero ha sido un robadero”, expresó la aspirante en un mitin en el municipio Atlacomulco, Estado de México.
Fue Crisanto Maya Miranda, jefe supremo del pueblo mazahua de San Felipe del Progreso, quien entregó el bastón de mando a la candidata opositora.
“Hermana Xóchitl, a nombre de mis hermanos originarios de nuestro querido Estado de México le hago entrega de este bastón de mando que simboliza la hermandad entre gobierno y pueblo. Seguros estamos de que usted va a ser nuestra próxima presidenta”, enfatizó al entregar el bastón.
En su intervención, Xóchitl calificó como una “robadera” los altos costos en los que han resultado la construcción del Tren Maya en el sureste del país y la refinería Olmeca en Tabasco, proyectos que, sostuvo, “han triplicado su costo”.
“Por eso no hay dinero para carreteras, por eso los caminos se están cayendo a pedazos, porque es una robadera”, abundó.
Desde el Estado de México, prometió ampliar la vía Atlacomulco-Toluca, y dijo que se volverá a invertir en carreteras en todo el país.
Además, aseguró que regresarán programas para pueblos originarios, como el Fondo de Infraestructura para Pueblos Indígenas: “Ya no se volvió a hacer ninguna universidad intercultural nueva; es más, se canceló el Fondo de Infraestructura de los Pueblos Indígenas, se cancelaron muchos programas sociales”, dijo.
También lamentó que se hayan quitado apoyos a campesinos y se abandonara el campo mexicano, pues argumentó que el actual gobierno quitó apoyos a los productores, programas para el campo y las garantías de precios, entre otros.
“Todo eso se quitó y por eso vamos a regresar”, insistió.
Xóchitl también criticó a los políticos que abandonaron las filas del antes hegemónico Partido Revolucionario Institucional desde Atlacomulco, uno de los destinos considerados bastiones del PRI, y los tachó de corruptos.
“Desde aquí, la cuna del PRI, donde hay buenos priístas, donde hay priístas que creen en México; hay otros que ya se fueron, pero no crean que se fueron por gusto, se fueron porque tiene una cola tan larga que tiene miedo que los metan al bote, por eso se fueron, pero aquí se quedaron los buenos priístas, los priístas trabajadores”, dijo.