CANCÚN.- En Cancún, la incorporación de cámaras de solapa por parte de las autoridades municipales marca un cambio relevante en la forma de supervisar el trabajo policial.
Estos dispositivos registran en tiempo real cada interacción entre los agentes y la ciudadanía.
Además de prevenir posibles abusos, contribuyen a fortalecer la confianza pública en las instituciones.
De hecho, las grabaciones ya se utilizan como evidencia en investigaciones relacionadas con denuncias ante organismos de derechos humanos.
Implementación de cámaras
El municipio adquirió cientos de cámaras destinadas a los elementos de la Policía de Cancún. Cada dispositivo opera mediante reconocimiento facial y datos biométricos, lo que impide su manipulación o apagado por parte de los agentes.
Las autoridades señalan que se garantiza que el material captado sea auténtico y verificable. En consecuencia, cada turno policial quedaría documentado.
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Con esta tecnología, las denuncias ciudadanas ahora contarían con respaldo visual, lo que permitiría a las instancias de supervisión actuar con mayor rapidez y precisión.
Según las autoridades locales, dicen que las cámaras “han ayudado a resolver quejas” presentadas contra policías municipales.
Retos y expectativas a futuro
Aún existen desafíos importantes, entre ellos, garantizar la descarga, conservación y acceso seguro de las grabaciones.
También resulta esencial que los protocolos de uso se cumplan de manera estricta para proteger los derechos de todas las partes involucradas.
La expectativa es que la población refuerce su confianza en los cuerpos de seguridad. Aunque el éxito de esta herramienta dependerá de la correcta aplicación, supervisión y compromiso de las autoridades.