CHICAGO (EFE).— Combinar la terapia hormonal con el fármaco ribociclib reduce de forma significativa el riesgo de recaída en el cáncer de mama en estadios iniciales HR+/HER2-, el subtipo más común de la enfermedad.
Así lo indica el ensayo clínico en fase III Natalee, encabezado por el oncólogo Dennis Slamon y publicado ayer con motivo de la inauguración en Chicago del congreso de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés), el principal del sector y que hasta el próximo martes se llevará al cabo con unos 40,000 participantes.
El estudio, financiado por la farmacéutica Novartis, se llevó al cabo de enero de 2019 a abril de 2021 entre 5,101 hombres y mujeres pre y posmenopáusicas de 20 países y con cáncer de mama HR+/HER2- en fase inicial IIA, IIB o III y riesgo de reincidencia.
Tratamientos diferentes
Se les asignó al azar ser tratados con ribociclib durante tres años, junto con cinco años de terapia hormonal, o solo terapia hormonal durante al menos cinco años.
Hubo 2,549 personas en el primer grupo y 2,552 en el segundo. El ribociclib es un inhibidor de las proteínas CDK4/6, que se encargan de regular el ciclo celular.
En el seguimiento efectuado en enero de este año, el 74.7% de los participantes continuaba en el estudio: 1,984 con ribociclib más terapia hormonal y 1,826 solo con esta última.
El trabajo comprobó que añadir ribociclib al tratamiento hormonal mejoraba la supervivencia sin signos ni síntomas de cáncer y que el riesgo de reincidencia disminuía un 25%.
De los 426 casos de supervivencia libre de cáncer evaluados, hubo 189 recaídas en el grupo con ribociclib (7.4% de los pacientes) y 237 en el de la terapia hormonal sola (9.2%).
La tasa de supervivencia libre de cáncer a los tres años fue del 90.4% en el grupo tratado con ribociclib, y del 87.1% en el que se sometió solo a terapia hormonal.
Los beneficios fueron consistentes independientemente del estadio de la enfermedad y si las pacientes tenían o no la menopausia.
La dosis inicial de ribociclib recomendada actualmente es de 600 miligramos. Sin embargo, según el estudio una duración prolongada puede ayudar a evitar que las células se dupliquen y dividan, y destruir las células cancerosas restantes.
Por ello, para reducir los efectos secundarios y mantener la eficacia, los autores del estudio eligieron un tratamiento de tres años con ribociclib en una dosis de 400 miligramos al día durante tres semanas, seguidas de una semana libre.
Entre los efectos secundarios más comunes detectados con el fármaco están dolor en las articulaciones y una disminución en la cantidad de los glóbulos blancos (neutropenia).
El doctor Slamon recuerda que la mayoría de cánceres de mama se diagnostica en fase temprana (I a III). El tratamiento habitual para pacientes con HR+/HER2- es cirugía con o sin quimioterapia o radiación, seguido de entre cinco y diez años de terapia hormonal.
El siguiente paso es seguir evaluando cómo la suma de ribociclib más terapia hormonal influye en la calidad de vida, y continuar el seguimiento a los pacientes para analizar los resultados a largo plazo.