La hija de N.S.P. antes que se le diera de alta voluntaria ante la posibilidad de trasladarla al hospital del IMSS, que también está saturado

Madre de familia relata dramas que vio en un hospital

TIZIMÍN.— La nueva variante del virus del dengue está provocando hoy una gran desesperación en familias al ver a sus pacientes en situaciones críticas en los hospitales, a tal grado de llevárselos a casa con cuidados especializados.

Sin embargo no todas las familias tienen los recursos y las condiciones para hacerlo, por lo que la mayoría se queda en las clínicas públicas en espera de que los médicos los saquen del peligro.

Tal es el caso de una madre de familia que vivió un calvario en el Hospital San Carlos al resultar su hija positivo a dengue.

N.S.P. relata que fueron los peores días de angustia, pues aunque el personal es atento con los enfermos y están al pendiente, no hay dónde poner a los pacientes.

Explica que a todos los que llegan los dejan en los pasillos de urgencias canalizados, esperando que se libere algún espacio en el área de piso, donde hay más enfermos en las mismas o peores condiciones.

Alta voluntaria ante la falta de una cama hospitalaria

Relata que las plaquetas de su hija fueron bajando muy rápido al grado que llegaron a 40, pero hicieron lo posible por estabilizarla hasta que desafortunadamente le dijeron que tenía Seguro Social y por lo tanto tendría que ser trasladada a otro hospital.

Sin embargo dice que en su desesperación por ver los hospitales hasta el tope, decidió pedir su alta voluntaria y llevarla a su casa cuando solo tenía 60 de plaquetas.

Hoy dice que poco a poco su hija se está recuperando, pero con cuidados especializados, desde servicios de enfermería con un químico que acude a diario para realizar la biometría hemática con plaquetas, la aplicación de soluciones salinas con potasio, el paracetamol y la dotación de alimentos ricos en proteínas.

Indica que mantiene a su hija en reposo absoluto, sin tener movimientos para evitar que bajen sus plaquetas, el suero es adicional y constante.

Lo que viví ahí fue un verdadero calvario, es triste ver a los pacientes en estado crítico, hay un área donde hay bebés con hemorragias, en otra a los abuelitos vomitando.

“Solo el domingo, cuando estuve ahí, ingresaron a cuatro niños donde estaba mi hija en situación grave, y se hablaba de la muerte de una niña que estaba internada ahí y falleció por dengue”, expresa.

Según dice, su hija es alumbra del Cobay donde varios estudiantes han dado positivo a dengue y también han pasado por la misma situación de tener a los alumnos hospitalizados.

“Considero que, así como lo están haciendo en Valladolid, deben cerrar escuelas” expresa.— WENDY UCÁN CHAN

Lee también: Cinco medicamentos que podrían aumentar el riesgo de dengue grave

Noticias de Mérida, Yucatán, México y el Mundo, además de análisis y artículos editoriales, publicados en la edición impresa de Diario de Yucatán