Han enviado peticiones para el arreglo de vías y la construcción de caminos para sus labores, pero hasta ahora han sido ignorados.
VALLADOLID.— Lorenzo Chuc Chan, comisario municipal de Popolá, entregó un oficio a la empresa Ingenieros Civiles y Asociados (ICA) en el que le señala las deficiencias detectadas en el puente que une a esa comunidad con el ejido y otras propiedades, cuya obra dejaron abandonada sin concluirla y que pone en riesgo a los conductores de vehículos de la población.
En días pasados el mismo comisario mostró las deficiencias del puente, y según lo señalado u observado ya está cuarteada una de las subidas y bajadas del puente; hay partes que ya se hundieron, debido a que el escombro de relleno ya se sumió unos 20 centímetros a consecuencia de las constantes lluvias.
El comisario explicó que en los laterales del puente se puede percibir el material suelto que representan un constante peligro, incluso la misma empresa solo mandó instalar algunas señalizaciones en las partes deterioradas para que los autos y camionetas lo esquiven cuando circulen.
Empresa ignora solicitud para arreglar un puente
La autoridad de la comunidad manifestó que luego de entregar el escrito, hasta el momento ICA no ha mandado reparar las deficiencias y teme que así lo vayan a dejar, tomando en consideración que la obra permanece abandonada y los empleados ya están en otros tramos, algunos por el rumbo de Izamal y otros por Quintana Roo.
No se descarta la posibilidad de ponerse de acuerdo con comisarios de otras poblaciones que están a lo largo del tramo de Yucatán que les ofrecieron algunas obras que no les cumplieron, solo es cuestión que las autoridades de cada comunidad se coordinen para llevar al cabo movimientos en cuanto inicie operaciones el Tren Maya.
Se averiguó que los pobladores de Pixoy, a quienes también les ofrecieron la construcción de un paso ganadero y no les cumplieron, ahora se ven obligados a pasar caminando por las vías del Tren Maya y luego cruzar la carretera de cuota, en donde se encuentran sus parcelas y sus pequeños ranchos.
Comentaron que ante el avance de la obra del Tren Maya, es casi un hecho que no les cumplirán con los ofrecimientos que se hicieron, incluso en algunos núcleos ejidales se firmaron acuerdos que no se cumplieron, por lo que la molestia es más generalizada y podría derivar en movimientos de la gente del campo que fue afectada en sus tierras.
Por otro lado, el problema de los ejidatarios de Chan Yokdzonot con Fonatur, encargada de la obra, a quienes les ofrecieron construir su camino al ejido de 2.5 kilómetros aún no se resuelve, de modo que el camino sigue cerrado, quedando un taller de mantenimiento dentro de las tierras ejidales.— Juan Antonio Osorio Osorno
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