PROGRESO.- El primer domingo posterior al período vacacional de verano se vivió con un notorio “bajón” de visitantes en el puerto de Progreso.
La diferencia respecto a las semanas anteriores fue evidente, aunque la jornada dominical no dejó de ser amena y con buena actividad, sobre todo gracias a la presencia de paseantes locales, en su mayoría provenientes de Mérida, que llegaron para disfrutar de un día en la playa.
Desde temprana hora, el malecón tradicional y la zona del malecón internacional registraron un ambiente más tranquilo que en los domingos de agosto, cuando las playas lucían abarrotadas por el flujo de turistas nacionales y extranjeros que llegaban en autobuses y vehículos particulares.
Este domingo, en cambio, el movimiento fue más moderado: familias meridanas y grupos de jóvenes optaron por aprovechar el clima soleado para descansar en la arena, refrescarse en las aguas del Golfo de México y degustar antojitos en los restaurantes y palapas de la franja costera.
Empieza la “temporada baja” en Progreso
De acuerdo con prestadores de servicios, la reducción en la cantidad de visitantes se siente de inmediato en las ventas, ya que septiembre suele marcar el inicio de la llamada “temporada baja” para el sector turístico.
No obstante, señalaron que la presencia de meridanos es vital para mantener la actividad en los comercios y restaurantes, al menos durante los fines de semana.
“Se nota mucho la diferencia, ya no vemos tantos camiones ni tanta gente en la playa, pero aun así hay ambiente”
“Hoy vinieron bastantes familias de Mérida y eso ayuda a que haya movimiento en los negocios”, comentó un mesero de un restaurante del malecón.
Vendedores reportan ventas “tranquilas”
Los vendedores de marquesitas, helados y cocos también reportaron un día con ventas más tranquilas, pero constantes.
En contraste, los prestadores de servicios indicaron que la demanda fue baja, comparada con la de semanas anteriores.
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Durante la tarde, las playas de Progreso ofrecieron una estampa muy familiar: niños jugando en la orilla, grupos de amigos tomándose fotografías frente al muelle de chocolate y parejas disfrutando de caminatas por el malecón.
En la zona del muelle fiscal, algunos visitantes aprovecharon para recorrer el andador turístico y adquirir artesanías en los puestos instalados.
Restaurantes reportan flujo moderado
Los restaurantes de la calle 80 y alrededores tuvieron un flujo moderado de clientes, con tiempos de espera mucho más cortos que en el verano.
También fue notoria la disminución en el tráfico vehicular hacia el puerto. En la carretera Mérida-Progreso el tránsito fue fluido en ambos sentidos durante gran parte del día.
Lo anterior a diferencia de los congestionamientos habituales que se registraron en las últimas semanas de julio y agosto.
En cuanto a la seguridad la jornada transcurrió con tranquilidad bajo la vigilancia de la Policía Municipal de Progreso en conjunto con la estatal para garantizar el orden y la seguridad de los bañistas. No se reportaron incidentes mayores.









