El otrora recio zaguero de América y Veracruz en la Primera División, y también de la Selección Nacional, es fan de una de las promesas del golf mexicano: su hijo Aarón.
Con 19 años, Aarón es uno de los punteros del Latín American Amateur Championships que se desarrolla en el campo “El Camaleón”, en Mayakoba.
Desde casi niño Aarón vive en los greens. Sus andanzas las comenzó cuando Isaac estuvo con Irapuato y su vivienda quedó justo en un club de golf.
Y desde los 12 años ha estado participando en torneos nacionales e internacionales, aunque antes fue becado en una academia en Carolina del Norte.
“Es uno de los mejores exponentes amateurs que tenemos “, dijo Jorge Robleda Moguel, presidente de la Federación Mexicana de Golf, cuyo trabajo al frente del deporte está muy enfocado al desarrollo de los talentos infantiles y juveniles.
Ayer Aarón era el jugador mexicano a seguir. Lo s. medios de comunicación mexicanos, incluido el Diario, siguieron el recorrido por el desafiante campo a orillas de la Riviera Maya.
La familia de Terrazas igual estaba. El papá del golfista iba detrás siempre, alejado del entorno. Su madre y otros integrantes del clan Terrazas iban en el grupo, en silencio.
El rostro del exjugador mostraba el nervio lógico de cuando un papá ve en acción a su hijo. Por mucha pierna fuerte y el recio carácter en la cancha de fútbol, todo se reduce a mirar y morirse de tensión.
“Lo dejo jugar. Respeto lo que hace”, alcanzó a decir Isaac luego de la salida de Aarón en el grupo en el que iba también el chileno Gabriel Morgan Birak, otro de los punteros.
“No puedo hablar mientras él juega. No es fácil”, se disculpó.
Y entendible. Aarón Terrazas salió ayer con posición interesante en el LAAC, como se conoce al torneo, que reparte un boleto para el Masters de Augusta, el British Open y el US Open de este año.