"El momento en el que pones fecha límite a tus sueños, se convierten en una meta", escribió el yucateco Rommel Pacheco, secto lugar en clavados en los Olímpicos de Tokio.- Foto Twitter Rommel Pacheco

Con un vibrante, conmovedor mensaje que plasmó en sus redes sociales, el yucateco Rommel Pacheco Marrufo se despidió de los Juegos Olímpicos de Tokio y de su larga carrera deportiva.

El atleta meridano, que desde hace más de dos décadas compitió en el nivel más alto de las plataformas de clavados del mundo, agradeció a todos los que en su andar, en sus saltos a la piscina, le tendieron la mano.

Agradecido con todo México

“Y al final de mis años como deportista aprendí a disfrutar el camino… Me voy pleno y feliz porque siempre di todo de mi. Gracias a toda la gente de México por tanto cariño”, rubricó Rommel Pacheco.

Y aunque sabe que no consiguió la anhelada medalla olímpica, el único laurel que le faltó para coronar una trayectoria de éxitos, se va con el cabeza en alto y satisfecho.

Satisfecho de lo que logró

A pesar de no portar alguna presea olímpica, el atleta dijo adiós a Tokio con la satisfacción de dar lo mejor en cada competencia a lo largo de sus 25 años de carrera.

Con entereza y humildad aceptó el resultado que se puede leer entre líneas en su texto de despedida, donde dejó muy en claro su correspondencia a la afición que siempre lo alentó.

Nuevos rumbos

Con lágrimas en los ojos, que se escondían con el agua de la fosa de clavados que le escurría por el cuerpo, Rommel Pacheco selló su partida con un abrazo con los integrantes de su equipo de entrenamiento.

Y ahora va en busca de nuevos horizontes. Recién casado, con la influencer yucateca Lylo Fa, y electo diputado federal por el tercer distrito de Yucatán, Rommel volverá a su tierra y seguro escribirá más capítulos en el libro de su nueva vida.

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