MÉRIDA.- Las exclamaciones que se escucharon, con intensidad, fueron la mejor forma de premiar la intensidad, disciplina y decisión que se vivió ayer en el combate de los exámenes de grado del XXVIII Seminario Internacional de Karate Shotokan.

El punto clave del Seminario se vivió ayer a todo lo que da.

Doce exponentes se presentaron ante la mirada del shihan Hiroyoshi Okazaki, jefe de instructores de la Federación Internacional de Karate Shotokan (ISKF), y un grupo selecto de expertos karatecas para presentar los avances en el arte marcial que cada uno tiene.

Karate de altos vuelos en jornada de exámenes del Seminario Internacional de Shotokan

Luego de presentar sus katas, parte esencial en el arte marcial, llegó el momento de participar en combate libre, y las exclamaciones se dejaron sentir, permitiendo momentos de una intensidad muy alta.

Fue una guerra total, poniendo a todos al borde de sus asientos o comiéndose las uñas ante la tenacidad y decisión con que se afrontaron uno a uno.

Los de mayor grado, especialmente, se brindaron con todo para tratar de cumplir con su propuesta ante los ojos de los expertos.

“Fue una muy buena señal de que el trabajo que están realizando aquí en el Dojo es positiva. Hay que pulir algunos detalles, lo sabemos, el perfeccionamiento siempre será el reto en el karate”, destacó el shihan Okazaki tras las pruebas.

Probablemente no todos aprueben sus exámenes, pero eso, afirmó el jefe de instructores, “es parte del aprendizaje. Nunca se dejará de trabajar en mejorar”.

Resaltó la kata presentada por José Ernesto Gil Argáez, quien presentó para sexto dan, y la tenacidad y sentido de competencia que mostró Roel Tamayo Aguilar, quien presentó para cuarto y fue el que ofreció combate a los dos que presentaron para sexto.

Entre las damas, Perla Brisa Pérez Sánchez (en busca del cuarto dan) y Alejandra Carrillo Díaz (tercero) también ofrecieron un interesante repertorio.

Durante las katas, los lapsos de largo silencio sólo eran rotos por las expresiones de los karatecas o el ruido de los autobuses que circulaban en la avenida “Shutan” Medina, en Montecristo.

Clase para instructores de karate

Antes de los exámenes, el shihan Okazaki ofreció una clase para instructores en cintas negras y marrones, en las que, detalladamente, les fue haciendo señalamientos para mejorar.

“Son pequeños puntos, pero hay que trabajarlos”, les dijo el exponente, y lo reiteró ante el Diario más tarde.

Durante cada época de Seminario, Okazaki y los responsables del Dojo Central del Sureste hacen énfasis en los puntos a mejorar.

“La disciplina del karate de lleva a mejorar siempre, o a tratar de mejorar. Es una lucha que no se termina y eso es algo importante porque siempre se tiene que trabajar y trabajar”.

Hoy, en la jornada de clausura del XXVIII Seminario Internacional, se entregarán los resultados de los exámenes.

Antes, habrá una clase magistral final, en la que, seguramente, Okazaki hará señalamientos para la mejora. No pasar no será un revés.