• Norberto Obeso aterriza a salvo en el plato con la carrera de la quiniela. Abajo, un oficial de seguridad “atrapa” a un niño que se salió del espacio en un concurso y se metió al terreno de juego. Izquierda, Art Charles recibe a Yadir Drake, quien bateó jonrón

Todos los partidos que quedan en el rol regular son como un juego 7 para los Leones de Yucatán y Odrisamer Despaigne lo sabe.

El cubano tendrá hoy quizá la oportunidad de borrar parte de lo complicado que la ha resultado la temporada 2025 con las fieras, al abrir el segundo encuentro de una serie vital tanto para su equipo como para el Águila de Veracruz.

Despaigne no las ha tenido todas consigo. Los números así lo dicen: récord de 3-5 y efectividad de 8.71, nada alentador ni para él ni para el equipo. Su rival en la loma será el dominicano Dinelson Lamet, quien tiene marca de 6-5, efectividad de 5.20 y ha recetado 82 ponches, colocado entre los mejores de este último renglón.

Los Leones, que fueron dirigidos ayer por primera vez por el venezolano Eliézer Alfonzo, necesitan que Despaigne camine cuando menos cinco entradas para usar lo menos posible a su maltrecho cuerpo de relevistas.

El bullpen león, por cierto, recibió en la “ventana” de compras finales de la LMB a dos relevistas con etiqueta de cerradores. Ya había anunciado a Jake Sánchez, protegido desde días atrás, y el lunes adquirieron a Héctor Pérez, en una operación que llevó a Caliente de Durango al yucateco Saúl Vázquez.

Vázquez, de acuerdo con los números, era de los que mejor se vieron en el bullpen antes de que, por extrañas razones, dejaran de utilizarlo y lo desactivaran del róster. Oficialmente no se ha dicho la o las razones de su salida. Dejó récord de 2-0, con 4.96 de carreras limpias y 36 ponches en 32 entradas y un tercio.— Gaspar Silveira