Vigilando el entrenamiento de Júnior Granados Credit: Gaspar Silveira Malaver 
Con Erik “Terrible” Morales, leyenda mexicana a quien dirigió en sus inicios Credit: Gaspar Silveira Malaver 
Con el psicólogo deportivo yucateco Miguel Durán Fritz Credit: Gaspar Silveira Malaver 
Con Banano Escalante, Silverio “Chamaco” Ortiz, Guty Espadas padre y Henry Vidal Gijón Credit: Gaspar Silveira Malaver 
Magallo Lozada, en sus años de gloria como boxeador Credit: Gaspar Silveira Malaver 
Magallo Lozada con Concho Velázquez, uno de sus mejores boxeadores Credit: Gaspar Silveira Malaver
MÉRIDA, Yucatán.— Una de las vivencias que más recordaba Margarito Lozada era el grito consagratorio de “campeón… allí se va el campeón”, que se escuchaba cuando caminaba por las calles.
Eso fue en su época de boxeador, de monarca nacional. Luego fue un destacado maestro de boxeadores. Y también le reconocían por esa labor.
“Magallo” Lozada para el pugilismo, Margarito Lozada Ceballos falleció el domingo en Ciudad de México y su partida dejó hondo pesar. Fue un yucateco destacado dentro y fuera del ring.
Nacido en el municipio de Yaxkukul, tenía 78 años de edad.
Fue un grande antes de lo que él decía “llegaran los que sí alcanzaron la meta grande”.
Antes que Miguel Canto y Guty Espadas llegaran al trono mundial, Magallo cimentó parte del difícil camino que lleva a la gloria.
No olvidaba una fecha memorable para él y el deporte yucateco: el 28 de julio de 1973. Siempre que podía la recordaba. En sus visitas a las celebraciones del Día del Boxeador lo recordaba.
Esa noche, en la Plaza Mérida, que además de sus brillantes corridas de toros era el templo del boxeo yucateco, se proclamó campeón nacional de peso gallo. Su victoria ante Salvador Martínez Carrillo, le hizo parte de la leyenda del viril deporte en la entidad.
Era, coincidieron muchos en sus notas de duelo por Magallo, cuando los títulos nacionales tenían un gran valor y era lo que ayudaba a saltar peldaños en las clasificaciones mundiales.
La corona la perdió en su primera defensa.
Pero su trayectoria tuvo mucho más que un cinturón nacional.
Una de las cosas de las que hablaba era algo que pocos podían presumir: fue a Nicaragua a pelear y aguantarle diez vueltas a Alexis Argüello, que más tarde se convirtió en leyenda del boxeo mundial.
Igual aparecen en su palmarés peleas grandes como las que sostuvo ante Lupe Pintor, al que venció, y Carlos Zárate, el “Cañas”. Los dos fueron monarcas mundial en peso gallo. Además, decía haber peleado con Wilfredo Gómez, gran figura de Puerto Rico.
Su debut, asienta BoxRec, se dio el 1 de abril de 1970, cuando venció a Babe San Martín. La última pelea registrada fue en 1983 ante Roger Arévalo, que era entonces una promesa del boxeo yucateco.
Decenas de peleadores y expeleadores mostraron su pesar en mensajes en redes sociales por Magallo. Una gloria del pugilismo yucateco.
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