Salvo sorpresas de última hora, Alejandra Cuevas Morán, quien está en la cárcel desde hace 15 meses, recobrará su libertad y será absuelta del delito de homicidio doloso del que la acusó —a ella y a su madre Laura Morán Servín— el hoy fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero. Alejandra y su madre recibirían amparo liso y llano de la justicia federal.
Así lo plantean los proyectos del ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena que este martes 22 fueron hechos públicos por la Suprema Corte y que serán discutidos el próximo lunes 28. Esto después de que en la sesión del lunes 14 de marzo, cinco ministros se pronunciaron por el amparo liso y llano para Cuevas Morán, pero otros cinco se manifestaron por estudiar el fondo del caso, en tanto que el ponente Alberto Pérez Dayán proponía conceder el amparo para efectos, lo cual equivalía a prolongar la resolución final, pues el asunto habría regresado a un tribunal capitalino.
La resolución del lunes 14 de la Corte generó suspicacias, en particular a causa de una expresión previa de Gertz, quien en los filtrados audios de su conversación con el fiscal Juan Ramos dice que “tenemos 3 o 4 ministros que nomás no se la van a dejar pasar (el proyecto de Pérez Dayán)”. El hecho de que cinco ministros hayan votado por entrar al fondo y pedir un nuevo proyecto de sentencia fue tomado como una materialización de lo que presumía Gertz, sobre todo de cara a lo ocurrido con el caso de Florence Cassez, quien fue absuelta por la Corte en 2013.
Importa detenerse sucintamente en la decisión de la Corte del pasado lunes 14:
1) Lo que se discutió en la sesión fue un proyecto que proponía un amparo para efectos —no la liberación de Alejandra— y éste fue rechazado; cuando esto ocurre, el asunto se reasigna para que un ministro distinto al ponente elabore una nueva propuesta, lo cual hizo Gutiérrez Ortiz Mena;
2) Como lo explicó el ministro presidente Arturo Zaldívar en conferencia de prensa, no hay paralelismo entre el caso Gertz-Cuevas y el de Florence Cassez. Las diferencias comienzan desde la esencia misma de los asuntos: en el de Cassez había ya una sentencia y en el de Cuevas se trata de un auto de formal prisión; además, el lunes 14 la resolución fue de la Corte en pleno y el de la ciudadana francesa lo votó la Primera Sala. En aquella ocasión Zaldívar presentó un proyecto que proponía la libertad inmediata y el amparo y liso y llano para ella, pero no fue aprobado. Diez meses después, ya sin Felipe Calderón en la Presidencia, se presentó un nuevo proyecto, de la ministra Olga Sánchez Cordero, que planteaba amparo para efectos. Este no fue aprobado y los ministros Zaldívar y Gutiérrez se declararon por el amparo liso y llano; habiendo ya esos dos votos, la ministra Sánchez Cordero se manifestó en el mismo sentido, hizo suyo el proyecto de Zaldívar rechazado meses atrás y la Primera Sala votó por la libertad de Florence.
“No se votó la libertad sin un proyecto que estableciera un amparo liso y llano… Entonces son dos casos completamente distintos y no hay que hacer paralelismos donde no hay”, expresó el hoy ministro presidente.
Graves debilidades
Al margen de la suerte que corra Alejandro Gertz —cada vez más insostenible en la FGR y ahora también acusado por Julio Scherer Ibarra—, el caso Gertz-Cuevas ha mostrado las graves debilidades de la justicia que se imparte en la Ciudad de México, donde prevalece un modelo que se repite a lo largo y ancho de la nación.
Venta de sentencias, tráfico de influencias, aplicación de criterios absurdos, consignas emitidas por los titulares de los tribunales superiores, sea por sí o acatando instrucciones del Poder Ejecutivo, caracterizan ese modelo de justicia local que hiede a corrupción y es un freno a la vigencia de un pleno estado de derecho. En el caso capitalino, los vicios se perpetúan y representan una gran deuda de la izquierda, que ha ganado la Jefatura de Gobierno durante un cuarto de siglo y ha tenido presencia trascendente en el Poder Legislativo. En el caso Gertz-Cuevas, la actuación de la generalmente eficiente fiscal Ernestina Godoy resulta lamentable porque la suya fue la instancia que llevó a la cárcel a Alejandra Cuevas.
Si bien hay deficiencias en el ámbito federal, en los estados y la capital la justicia fragilizada y corrompida clama por atención y por soluciones apremiantes.—Ciudad de México.
omnia08@gmail.com
Periodista
