Nos comentan que… un pleito entre funcionarios sería la primera chispa de una saga política, pues sus protagonistas son conocidos por su fuerte temperamento, dando de qué hablar a tan solo mes y medio de arrancar la nueva administración gubernamental en Yucatán.
Encendidos ánimos
La segunda jornada de “Audiencias con el pueblo”, que se llevó al cabo este martes en el patio central de Palacio de Gobierno, tuvo un inesperado episodio que corrió como reguero de pólvora en círculos políticos.
Se trata de un fuerte altercado entre Víctor Cervera Hernández, director del Instituto Yucateco de Emprendedores (IYEM), y Dafne López Martínez, coordinador del equipo de asesores del gobernador Joaquín Díaz Mena.
De acuerdo con las versiones que llegaron a esta columna, la bronca entre ambos funcionarios surgió cuando, estando en plena audiencia, cerca de las 4:30 de la tarde, Dafne López envió a una persona a decirle a Víctor Cervera que “le bajara” a sus publicaciones en redes sociales debido a que incomodan al gobernador.
La “recomendación” de López Martínez —desconocemos los términos en que se trasmitió— encendió los ánimos de Cervera Hernández, quien, visiblemente alterado, alegó que a él nadie le impide manifestarse y, alzando la voz, literalmente “mandó a volar” al súper asesor de Huacho Díaz.
Al darse cuenta de la ríspida reacción, según nuestras fuentes, Dafne López se acercó a Víctor Cervera para pedirle que se calmara, pero el director del IYEM le reclamó que le trate de prohibir que siga utilizando las redes sociales para publicar lo que desee.
El coordinador de asesores expuso sus argumentos, pero esto solo propició que ambos se enfrascaran en un altercado. Así, los dos se hicieron de palabras —algunos dicen que hasta altisonantes— y, después de una expresión de “vete a…” de López Martínez, el hijo mayor del fallecido Víctor Cervera Pacheco reaccionó encolerizado y le asestó una bofetada a su interlocutor. Los hechos llamaron la atención de quienes estaban participando en la audiencia. La tensión creció y propició la intervención de otros funcionarios y empleados del gobierno.
Tan solo el principio
Nos afirman que, después de la violenta discusión que protagonizaron anteayer, Víctor Cervera Hernández y Dafne López Martínez fueron llamados a los altos de Palacio para una reunión con el secretario general de Gobierno, Omar Pérez Avilés, quien habló con ellos y trató de mediar para calmar los ánimos. En la reunión no se permitió la introducción de teléfonos celulares.
Hay discrepancias sobre el primero en bajar después del supuesto jalón de orejas, pues unos dicen que fue Víctor Cervera y otros que se trató de Dafne López. En lo que hay coincidencia es en que ambos estaban visiblemente enojados.
Una de las versiones que circularon ayer es que López Martínez ya le había reclamado días atrás a Cervera Hernández por el contenido de sus publicaciones en las redes sociales y el presunto malestar que esto genera en el gobernador Díaz Mena.
Este encontronazo en el gabinete de Huacho, con apenas mes y medio de la actual administración, tiene a dos protagonistas que, por sus conocidos temperamentos, difícilmente lo dejarán como un hecho aislado y cerrado. Según observadores locales, este episodio puede ser el inicio de una saga política de dimensiones impredecibles.
Con los días contados
Muchos piensan que están contados los días de Rafael Hernández Kotasek al frente de la Agencia de Transporte de Yucatán (ATY). Y no parecen estar lejos de la realidad, a juzgar por recientes acontecimientos y declaraciones del gobernador Joaquín Díaz Mena.
A las protestas de transportistas, principalmente operadores y propietarios de taxis, en las instalaciones de la agencia se suma la leyenda “Fuera Kotasek” que son visibles en vehículos de alquiler en Mérida y el interior del Estado. También ha surgido un movimiento que agrupa a varias organizaciones de transportistas, que hace poco más de una semana ofreció una rueda de prensa en la que exigió la renuncia del funcionario.
Todo apunta a una estrategia bien orquestada contra Hernández Kotasek, quien fue designado titular de la agencia por el Congreso anterior para un período de 15 años, a propuesta del entonces gobernador Mauricio Vila Dosal.
El propio Huacho Díaz no oculta su malestar con el director. Hace unos días, en un evento público, el jefe del Ejecutivo declaró que el nombramiento del titular de la ATY fue resultado de cambios constitucionales que promovió su antecesor y ahora Morena tiene mayoría en el Congreso local, pero no una mayoría calificada para dar marcha atrás en asuntos del transporte y de otras áreas del gobierno.
“Si tuviéramos la mayoría (calificada) ya hubiéramos sacado a ese director de la Agencia de Transporte para nombrar a alguien con el que sí podamos tener esa confianza de trabajar adecuadamente”, manifestó Díaz Mena.
Al parecer el camino no sería el Congreso, sino las presiones externas para la salida del funcionario, quien, según nos dicen, tiene ofertas laborales fuera de Yucatán. La Agencia de Transporte no es cualquier dependencia. En su creación a fines de la administración anterior se le otorgó autonomía, lo cual significa que tiene presupuesto propio, y en su organigrama aparecen nada menos que siete direcciones generales que están bajo la coordinación del titular de la dependencia y la jefatura del despacho de la misma.
De esas direcciones generales dependen nueve direcciones y cinco subdirecciones. En síntesis, son 23 puestos de primer nivel, a los que se agregan cargos operativos. Un platillo muy atractivo para la administración de Díaz Mena. La gran pregunta es cuánto tiempo soportará Hernández Kotasek las presiones.
Visibles cambios
Como signo de los nuevos tiempos políticos, hasta en el deporte yucateco hay cambio de colores. En la ceremonia de entrega del Premio Estatal del Deporte 2024 y de las medallas al Mérito Deportivo Yucateco, el sábado pasado en Palacio de Gobierno, desaparecieron los uniformes azules que usaban los ganadores durante el sexenio anterior y en su lugar se utilizaron prendas con una combinación de blanco y un tono de rojo próximo al guinda, como preparando el terreno para que en la próxima edición las chamarras y los pantalones ya luzcan con el distintivo de la 4T, como se hace ahora en los vecinos Campeche y Quintana Roo. Hasta la edición 2023, los deportistas ganadores de esos galardones portaban uniformes azules, con una parte blanca en las chamarras.
