¿Se debe o no se debe poner foto de un recién fallecido en el altar de Día de Muertos?

Sabemos que el Día de Muertos es la celebración en la que se recuerda a las personas que ya no están con nosotros. Pero cuando sufrimos la muerte de un ser querido meses antes de esta festividad, las costumbres a seguir se ven modificadas. 

Y es que aunque no lo creas, son muchas las personas que se han cuestionado sobre si se debe o no poner la foto del fallecido el año que murió, o cómo realmente se debe “celebrar” el 1 y 2 de noviembre a meses de sufrir la perdida de un ser querido. 

¿Se debe o no poner la foto del fallecido el año que murió?

La respuesta es no, y la razón de esto surge de las creencias y costumbres que conforman y han erigido esta tradicional celebración mexicana, que desde años atrás ha generado gran interés en personas de todo el mundo. 

Foto de Grupo Burgos

No obstante, sitios web, historiadores y antropólogos han señalado que no solo no se debe poner la foto del fallecido el año que murió, sino que tampoco se pone ofrenda o altar esto debido a que así lo dictan las creencias prehispánicas y religiosas. 

Y es que recordemos que el Día de Muertos es una celebración que tiene sus raíces en éstas, mismas que por años han dictado cómo se debe llevar al cabo esta festividad. 

Pero en el caso del por qué no se pone la foto del fallecido el año que murió, se indica que esto no se debe hacer porque el alma del difunto está en un proceso de transición y debe encontrar su camino al Mictlán, en el caso de los náhuatls, o Metnal, en el caso de los mayas; así se evita que quede atrapado en el limbo.

Foto de Pinterest

La razón por la que no se pone la foto de un recién fallecido en el altar

Por su parte, la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo en una publicación sobre el Día de Muertos señala que, las personas que murieron un mes antes del 1 y 2 de noviembre no acuden a la ofrenda, pues todavía no tienen permiso.

Por lo tanto, se “convierten” en ayudantes de las otras ánimas que sí cruzarán hacia el mundo de los vivos. 

“Las ánimas llegan en forma ordenada. A los que tuvieron la mala fortuna de morir un mes antes de la celebración no se les pone ofrenda, pues se considera que no tuvieron tiempo de pedir permiso para acudir a la celebración, por lo que sirven solamente como ayudantes de otras ánimas”. 

Foto de Agenda San Luis

Asimismo, de acuerdo a las creencias religiosas y prehispánicas, la razón por la que no se debe colocar en el altar o la ofrenda, una foto de una persona que lleva menos de tres meses de haber fallecido es para no interrumpir su viaje. 

Las creencias dictan que el alma de esa persona se encuentra en el purgatorio o camino al Mictlán o Metnal, y no tiene permiso para regresar al plano terrenal, por lo que si su alma regresa a casa antes de tiempo se volverá más difícil que encuentre el descanso eterno.

Y si bien no puedes, o mejor dicho no debes poner su foto en el altar del Día de Muertos, eso no significa que no puedas recordarlo. Por ello si quieres “mantener segura” el ánima de tu ser querido, lo más recomendable es que acudas a su tumba —o bien donde están sus cenizas— y coloques flores o enciendas una veladora y ofrezcas a Dios una oración por el alma de esa persona difunta.

Foto de Pinterest

¿Cuánto tiempo debe pasar para poner una ofrenda a un recién fallecido?

Se considera que debe pasar al menos un año desde el fallecimiento de una persona para colocar su foto y ofrenda en el altar del Día de Muertos. 

A partir de entonces, en las celebraciones del 1 y 2 de noviembre, el alma del difunto puede regresar y ser recibida con los elementos que disfrutaba en vida, como alimentos, bebidas y objetos personales, siguiendo las costumbres de esta festividad mexicana. 

Foto de Capital 21

¿Cuándo se debe poner el tradicional altar de muertos?

La tradición marca que desde el 28 de octubre se inicia con la colocación de altares en memoria de aquellas personas que murieron de maneras violentas (a éstas se les coloca una veladora); luego el 29 de octubre se coloca una veladora y un vaso con agua en memoria de los difuntos que ya fueron olvidados.

El 30 de octubre la ofrenda se dedica a aquellos niños que murieron sin ser bautizados y por lo tanto, sus almas se encuentran en el limbo; el 1 de noviembre se pone en el altar la imagen de los pequeños que murieron, y se le conoce cómo el día de Todos los Santos.

Por último, el 2 de noviembre es el día en el que se coloca en el altar, la imagen de las personas adultas que han muerto y que extrañamos; y se les ofrenda comidas y bebidas que eran de su agrado, así como objetos que utilizaban, esto con la esperanza de que se deleiten durante esta fecha.

Foto de México Desconocido

¿Qué pasa si se le pone ofrenda a alguien recién fallecido?

Así como hay personas que se preguntan si se debe poner la foto de un recién fallecido en un altar de muertos, otras más también cuestionan qué pasa si se le pone ofrenda a quien recientemente murió.

La creencia popular indica que no llegará al Mictlán o Metnal, por lo que su alma sufrirá quedando en una especie de limbo en el que no podrá volver, pero tampoco podrá encontrar el descanso eterno. Por lo tanto se destaca que si una persona muere durante los meses de agosto, septiembre y hasta octubre, no se les debe poner en la ofrenda. 

Además hay que recordar que las animas también visitan las ofrendas para poder agarrar su “itacate” (provisión de comida o alimentos que se dan o llevan para el viaje) de regreso al mundo de los muertos. 

Por lo que se cree que los difuntos recién fallecidos le ayudan a los muertos de más de un año a cargar su “itacate”, es decir, lo que se llevan las ánimas de las ofrendas.

Foto de Soriana

La importancia de la foto de un fallecido en el altar u ofrenda de Día de Muertos

Es una realidad que la película de Pixar, “Coco”, despertó la conciencia de varios mexicanos, pues en dicha cinta animada, se mostró la importancia de colocar la fotografía del ser querido que ha muerto para que pueda cruzar el puente entre el Mictlán o Metnal y el mundo de los vivos. 

Pero de acuerdo con el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, la foto tiene que quedar escondida y que solo se pueda ver con un espejo, lo que señala que la persona ya no existe, pero se hace presente en estos días.

De igual modo, se menciona que se coloca la fotografía del fallecido para obtener la libertad del alma del difunto del purgatorio, por si acaso se encontrara en ese lugar. Pero para ayudarlo a salir también puede servir una cruz pequeña hecha con ceniza.

Foto de Yakult Puebla

El instituto también indica que pueden colocarse las imágenes de santos, pues éstos pueden interceder y también son como un medio de interrelación entre los muertos y vivos.

No obstante, vale la pena destacar que en pueblos de Yucatán no es necesario poner imágenes de los difuntos en los altares, y la antropóloga Hilaria Mass Collí reveló el porqué. 

No necesariamente se pone la foto, pero lo que sí hay que hacer es pedir por los fieles difuntos”, externó cuando comentó que las fotografías fue una costumbre que comenzó en Mérida y que luego fue imitada por la gente de los pueblos.

Foto de Civitatis

Cabe destacar que otra creencia de la cultura yucateca referente con el Día de Muertos, específicamente con el Hanal Pixán, es que durante el año que murió el ser querido no se puede preparar el tradicional pib o mucbipollo, porque se cree que se estaría quemando el cuerpo del fallecido (debido a que este plantillo es enterrado). 

Vianey Alejandra Paulino Cuxin es editora web egresada de la Licenciatura en Ciencias y Técnicas de la Comunicación por la Universidad Interamericana para el Desarrollo (UNID). Se incorporó a la División de Medios de Grupo Megamedia en marzo de 2015.