WASHINGTON (EFE).— El presidente estadounidense, Donald Trump, advirtió ayer a los demócratas de que no habrá solución para los jóvenes conocidos como “dreamers”, beneficiarios del programa DACA, a menos que construya el “desesperadamente necesario muro” en la frontera con México.
“A los demócratas se les ha dicho, y lo han entendido por completo, que no habrá DACA sin el desesperadamente necesario muro en la frontera sur y el fin de la horrible inmigración en cadena y el ridículo sistema de lotería migratoria”, afirmó en su cuenta de Twitter.
“Debemos proteger nuestro país a cualquier precio”, agregó el mandatario, quien está pasando sus vacaciones navideñas en su club privado de Mar-a-Lago, en Palm Beach (Florida).
El presidente anunció en septiembre la suspensión del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), impulsado en 2012 por el expresidente Barack Obama que permitió proteger de la deportación a 800,000 jóvenes indocumentados que entraron al país como niños y son conocidos como “dreamers”.
No obstante, Trump dio seis meses al Congreso, hasta el 5 de marzo de 2018, para encontrar una solución legislativa para la situación de los “dreamers”.
La oposición demócrata ha exigido una solución para estos jóvenes y ha insistido en su rechazo frontal a aprobar una legislación que incluya partidas presupuestarias para la construcción de la barrera física en la frontera con México.
La propuesta del muro ha sido una de las más controvertidas de Trump, y durante la campaña electoral aseguró que su construcción la pagaría México, algo que ha llevado las relaciones con el vecino del sur a su punto más bajo en décadas.
Por su parte, líderes “dreamers” calificaron de “peligrosa” la condición impuesta por Trump.
“Nosotros vamos a seguir trabajando con republicanos y demócratas en enero para lograr finalmente un acuerdo, lo que está haciendo el presidente con estas declaraciones es algo peligroso y una posición muy extrema”, dijo César Vargas, codirector del Dream Act Coalition.
Vargas indicó que las declaraciones de Trump ponen en peligro las negociaciones que podrían llevarse al cabo en enero próximo para impulsar una legislación antes de que expire DACA en marzo próximo.
El abogado añadió que tanto republicanos como demócratas están dispuestos a apoyar el alza del presupuesto de seguridad nacional para llegar a un acuerdo, pero los “dreamers” rechazan por completo la construcción de un muro o la eliminación de visas familiares.
“Se pueden dar más fondos para aumentar los sueldos de los agentes fronterizos, para tener una mejor infraestructura en los puertos de entrada, mejor tecnología”, dijo Vargas.
Por su parte, la “dreamer” Erika Andiola, exsecretaria de prensa de Bernie Sanders durante su campaña a la Presidencia, dijo que tanto republicanos como demócratas les han defraudado y que los jóvenes indocumentados están cansados de ser utilizados durante las campañas políticas.
Grupos de “dreamers” de todo el país se preparan ya para regresar a Washington en enero para retomar la presión sobre los congresistas, después de que sus esfuerzos fracasen este mes para que se aprobase antes de fin de año una legislación que les dé un estatus migratorio permanente.
Invitación presidencial
El presidente estadounidense, Donald Trump, invitó a agentes de la Guardia Costera de Estados Unidos a jugar ayer en su club de golf en West Palm Beach (Florida), donde él mandatario está practicando a diario su deporte favorito durante las vacaciones navideñas.
En la propiedad de Trump
Los medios que realizan la cobertura de las vacaciones de Trump y su familia informaron ayer de esta invitación a los guardacostas que vigilan por mar el club social Mar-a-Lago, propiedad del presidente y situado en Palm Beach, una isla unida al continente por varios puentes, en la costa este del sur de Florida.