Con el argumento de que están en desacuerdo con una eventual alianza del PRI con el PAN, los regidores meridanos María Fernanda Vivas Sierra y Óscar Eduardo Medina Cruz renunciaron ayer a su militancia priista y anunciaron que se suman al proyecto del senador Jorge Carlos Ramírez Marín, su padrino político.
Con su salida del PRI este partido queda, por ahora, con solo dos representantes en el Cabildo de Mérida: Ana Gabriela Aguilar Ruiz y Gabriel Barragán Casares.
Los dimitentes coinciden en sus conceptos en las cartas de renuncia que dirigen al presidente estatal del PRI, Gaspar Quintal Parra.
Entre otras cosas, dicen que su decisión es fruto de una profunda reflexión y de congruencia y alegan que no consideran correcta una alianza priista con un partido cuya forma de gobernar han criticado desde el Cabildo.
“Los judas y los traidores” no son los que se van, afirma
Medina Cruz se anticipa a las reacciones que generaría su renuncia y hace un llamado a que “cese la injuria y la represalia con el uso de penosos calificativos que en los últimos días han aflorado en las redes sociales” contra otros expriistas.
También señala que “los judas y los traidores” no son los que se van, sino “los que se quedan” y que, de manera mezquina, venden al partido “por unas monedas y lo destruyen como el comején a la madera”.
María Fernanda Vivas se pronuncia en el mismo sentido: afirma que “el verdadero acto de traición” lo cometen “el partido, sus dirigentes y aquellos que aceptan esta alianza”.
Los ediles añaden que han decidido sumarse a la causa de Ramírez Marín, quien, como se sabe, se incorporó al Partido Verde Ecologista de México y ha expresado su interés en ser candidato a la gubernatura en una alianza del PVEM con Morena.— ÁNGEL NOH ESTRADA