Instalaciones del Tecnológico de Mérida

No se realizarán actividades de manera virtual

 

Hace 25 años, cuando el Instituto Tecnológico de Mérida cumplió su 35 aniversario, nueve alumnos ingresaron a la pista con un mariachi para celebrar a su alma máter.

Organizado por Manuel Fuentes Echeverría y algunos compañeros, ese evento fue el primero que se realizó para que en la fecha de la fundación del Tec haya un festejo trascendental.

Ese día solo hubo mariachi y convivio, pero con el paso del tiempo se fue haciendo más grande, abarcando incluso varios días, pues no solo había un convivio y eventos culturales, sino también charlas, conferencias y carreras. Este año sería igual, pero entonces surgió la pandemia.

“Decidimos que no se puede hacer y tampoco habrá de forma virtual”, comentó el ingeniero Fuentes Echeverría, quien actualmente, además de dirigir su propio negocio, se desempeña como profesor de Ingeniería Industrial en la institución.

En entrevista con el Diario, reconoció que aunque les hubiera gustado celebrar, la situación no lo permite y que mejor comenzarán a planear cómo festejar los 60 años de la fundación de la escuela. En cuando al homenaje, dijo, este 2020 sería el número 25, pero ahora el 25 será en 2021.

El Instituto Tecnológico de Mérida abrió sus puertas el 17 de septiembre de 1961, pero se inauguró oficialmente cuatro meses después, el 18 de enero de 1962, en ceremonia que encabezó Adolfo López Mateos, entonces Presidente de la República.

El ingeniero Fuentes Echeverría recordó que el de Mérida fue el octavo Instituto Tecnológico del país, antes se crearon los de Durango, Chihuahua, Saltillo, Ciudad Madero, Orizaba, Veracruz y Celaya.

El Tec abrió sus puertas con 410 estudiantes distribuidos en cinco ciclos de enseñanza; Secundaria Técnica, Preparación Técnica para Trabajadores, Subprofesional, Vocacional de Ingeniería y Profesional de Ingeniería Industrial.

Su infraestructura de aquel entonces estaba compuesta de oficinas administrativas, 10 aulas, tres salones de dibujo, una nave para laboratorios de biología, física y química, así como otra para los talleres de fundición, ajuste de banco y máquinas, herramientas, soldadura y forja, máquinas de combustión interna, electricidad, y preparación y conservación de productos alimenticios.

Con el paso de los años los planteles se fueron adecuando y surgieron nuevos programas de licenciatura. Actualmente el Instituto Tecnológico de Mérida cuenta con 13 programas de licenciatura y seis posgrados (cinco maestrías y un doctorado).— Iván Canul Ek

El ingeniero Fuentes destacó que la institución ha brindado un gran aporte a la sociedad. Por ejemplo, recuerda que en su época se fabricaban cambios de vía para Ferrocarriles del Sureste.

“Surtíamos todo el estado de Yucatán, Campeche, Tabasco y parte de Veracruz. Era muy común que un servidor por parte del Tecnológico o del Patronato, como le llamaron, estuviera en Coatzacoalcos, en el Istmo, Industrias Resistol, Complejo Pajaritos, porque nosotros fabricábamos todos los herrajes de ferrocarriles para esa zona”.

 

De un vistazo

El ITM

El ingeniero Fuentes Echeverría subrayó que el Tec se creó para formar ingenieros que pudieran resolver los problemas tecnológicos de aquella época”.

Rama

El entrevistado añadió que hoy la visión ha cambiado y que, así como el marketing tendrá un papel destacado, la manufactura flexible, la manufactura esbelta y la automatización buscan un papel primordial en todo lo que es ingeniería.

 

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