BUENOS AIRES (EFE).— La transición en Argentina hacia el nuevo Ejecutivo que tomará posesión el 10 de diciembre comienza sin el previsto encuentro entre el presidente del país suramericano, el peronista Alberto Fernández, y el mandatario electo Javier Milei.
Pese a que en la víspera, en medio de la noche electoral que confirmó el triunfo del líder de La Libertad Avanza (ultraderecha) sobre el oficialista Sergio Massa, la Presidencia argentina confirmó que ayer, festivo por el Día de la Soberanía Nacional, habría una reunión entre ambos líderes, esta no se dio.
Por su lado, fuentes oficiales informaron que Massa seguirá como ministro de Economía y que dispuso un equipo de transición que apoye a Fernández, en sus contactos con Milei.
Fuentes de Economía informaron del encuentro que el titular del Palacio de Hacienda mantuvo ayer junto a estrechos colaboradores para establecer un equipo de trabajo que ayude a Fernández en la transición.
Milei privatizaría “todo”
En una serie de entrevistas radiales horas después de haber triunfado en el balojate del domingo, el economista de ultraderecha y presidente electo de Argentina, Javier Milei, fue consultado sobre el tiempo que le tomará cumplir con su promesa de terminar con la inflación, que en la variación interanual alcanzó 142.7% en octubre.
“Si vos cortás hoy con la emisión monetaria, ese proceso tarda entre 18 y 24 meses”, aseveró Milei.
Cuando le preguntaron a qué niveles llegará la inflación para entonces, el futuro presidente enfatizó que requiere de ese plazo para “destruirla”.
El economista ultraliberal de 53 años anticipó un plan de privatizaciones de empresas públicas que incluye a Yacimientos Petrolíferos Fiscales, S. A. (YPF) y los medios públicos de televisión, radio Nacional y la agencia oficial de noticias Télam.
“Todo lo que pueda estar en las manos del sector privado, va a estar en las manos del sector privado”, ofreció el líder de la coalición Libertad Avanza en Radio Mitre, tras cosechar un 55.69% de los votos frente al 44.30% del peronista Sergio Massa, actual ministro de Economía.
Cambio radical
El triunfo de Milei superó cualquier expectativa y marcó un cambio radical en el sistema político del país sudamericano, que decidió dar un giro a la derecha en medio de un profundo malestar social por la inflación de más de 142% anual y el aumento de la pobreza, que hoy afecta a 40.1% de la población.
El programa del economista contempla un fuerte recorte del gasto público, privatizaciones, el cierre del Banco Central y la dolarización de la economía para combatir la suba de precios, entre otras medidas que marcan un giro drástico con las políticas intervencionistas del peronismo que está actualmente en el gobierno.
Milei acotó que antes de llevar al cabo la privatización de la petrolera YPF, “primero hay que recomponerla” y “racionalizar” su estructura. La empresa fue estatizada en 2012, durante el mandato de la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y quien hoy funge como vicepresidenta.
El libertario culpó del “deterioro de la empresa” al Kirchnerismo, la variante centroizquierdista del peronismo que ha estado en el poder la mayor parte de las últimas dos décadas.
Respecto a la TV Pública, el presidente electo afirmó en tanto que “se ha convertido en un mecanismo de propaganda” y la acusó de haberse referido a La Libertad Avanza de manera negativa.
En cuanto a sus próximos viajes al exterior, dijo que “en estos días” irá a Miami y Nueva York a visitar a unos rabinos amigos, sin dar más detalles al respecto, y que desde esa última ciudad se trasladará a Israel. “El viaje tiene una connotación más espiritual que de otras características”, indicó.
Durante la campaña electoral, Milei visitó en Nueva York “El Ohel”, lugar que cobija la tumba de un rabino. Esa visita generó especulaciones de medios de prensa acerca de si el entonces candidato planeaba una conversión espiritual hacia el judaísmo, religión que ha elogiado en varias de sus intervenciones públicas.