TIZIMÍN.—La fuerte sequía preocupa al sector ganadero, ya que empieza a tener pérdidas debido a la muerte de sus animales por falta de pasto y los elevados precios del alimento procesado, pacas, silos, melaza y pollinaza para mantenerlos con buen kilaje.
Además, la mayoría de los productores no puede pagar alimentos procesados para sus reses, debido a los altos precios.
En Panabá, Sucilá y los cercanos a la costa de San Felipe y Río Lagartos son los más afectados por las altas temperaturas, según un sondeo entre algunos productores de zona.
Los entrevistados afirman que otro factor desfavorable es que carniceros ya no adquieren reses débiles por la falta de alimento porque no es redituable, ya que consideran que es más hueso que carne.
Por lo mismo, el ganadero prefiere dejar esos animales para el consumo de las aves de carroña en los potreros donde perecen.
Según los productores, el precio de las pacas está entre los 85 pesos y 150 pesos y cada una alcanza para alimentar a cinco animales en un día, o sea, que si el pequeño productor tiene hasta 10 animales requiere invertir en pasto seco alrededor de $200 a $300 al día.
Esto no garantiza que el animal mantenga su peso en kilaje, únicamente es para evitar que se muera por la falta de comida.
Los que tienen un poco más de recursos económicos pueden comprar pollinaza, cuyo precio es de unos 2,600 pesos la tonelada.
Y si se disuelve con agua de melaza, el precio de este producto que le da un sabor dulce a la pollinaza es de hasta 1,500 pesos el tambor de 200 litros y $192 el bidón de 20 litros. Pero son pocos los que aplican este método; la mayoría mantiene a sus animales a salvo con las pacas de pasto de la región, de mombasa o de alfalfa e, incluso, con árboles forrajeros como el chaká, ramón y huaxin.
Según la opinión de los expertos, el suministro de alimento procesado y melaza con pollinaza es principalmente a las reses destinadas para engorda.
Asimismo, se les puede dar silos de maíz o de pasto forrajero, que se vende en bolsas de 50 kilogramos. El precio promedio de la tonelada es de 4,200 pesos.
En este caso, cada toro puede comer hasta 40 kilogramos de silo al día, con la garantía de consumir proteínas, minerales y nutrientes esenciales para conservar el kilaje.
Los productores destinarían alrededor de $160 al día en comida por cada animal, lo que resulta difícil de costear en esta temporada de sequía. — Isauro Chi Díaz