Menonitas causan incendios en Yucatán y desplazan a jaguares

Menonitas causan incendios en Yucatán y desplazan a jaguares, especie en peligro de extinción; una especialista expone un caso concreto.

Tekax, Yucatán.- Los menonitas quemaron 350 hectáreas de selva maya en Tekax, Yucatán, para cambiar el uso de suelo sin permiso, y realizó tala ilegal en otros estados de la Península de Yucatán, informó hace 3 días la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

Pero arrasar la selva en Yucatán provocando incendios es una vieja práctica de la comunidad menonita en la región, pues en 2019 se documentó que esa fue la causa del desplazamiento de jaguares en Mesatunich, localidad de Tekax, relata en entrevista con el Diario, Minneth Beatriz Medina García, directora de la Junta Intermunicipal Biocultural del Puuc (JibioPuuc).

Medina García ha expuesto que este grupo se expande cada vez más en Yucatán, utlilizando un sistema de agricultura intensivo que amenaza el ecosistema y rompen el tejido social, ya que también generan desplazamiento humano.

El riesgo para los recursos naturales no es menor, pues el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS) señala que la Península de Yucatán ha perdido 285,580 hectáreas de selvas en solo cuatro años, de 2019 a 2023, que implica un proceso de degradación y deforestación que amenaza la supervivencia de ecosistemas, especies y formas de vida humanas.

El día que los menonitas desplazaron jaguares causando incendios en Yucatán

En este contexto, la también especialista en desarrollo regional sustentable recuerda un caso concreto en 2019 cuando tras realizar quemas, los menonitas desplazaron de un área de Mesatunich, en Tekax, Yucatán, al jaguar —balam en maya—, especie en peligro de extinción según la NOM-059-SEMARNAT-2010, que era monitoreado en esa zona.

Pero la relevancia de este felino en la región, va más allá del ecosistema, pues en la cultura maya prehispánica era un animal sagrado asociado al poder, la muerte, las prácticas chamánicas, el cielo nocturno y el inframundo, pero también con la agricultura y la fertilidad.

Medina García relata cuando para establecerse en Tekax, en aquel año, quemaron una gran extensión de terreno, causando graves daños al medio ambiente, pues explica que esa práctica perjudicial elimina la protección natural ante desastres naturales, además de expulsar y desaparecer el habítat de diferentes especies como el jaguar, que entonces era monitoreaba la JibioPuuc.

“El gran impacto ambiental porque esos campos, por ejemplo, uno de los campos donde se establecieron (los menonitas en 2019) era una sabana y era una zona inundable.

“Nadie había invertido ahí por lo mismo, porque es un ecosistema frágil y de gran importancia para nuestra región. Incluso se estaba monitoreando jaguar ahí y de repente ya desapareció, en Mesatunich,Tekax.

“Esta área nosotros la estábamos monitoreando para jaguar, tomamos fotografías de jaguares y de repente nos avisa Conafor, que hay un incendio”.

Mesatunich, en Tekax, Yucatán, era zona de monitoreo de jaguares en 2019; quema de menonitas los desplazaron — Mesatunich, en Tekax, Yucatán, era zona de monitoreo de jaguares en 2019; tras quema de su hábitat por menonitas, se canceló.

Quema de menonitas en Yucatán en 2019 quedó impune: Profepa no avanza más alla del sello

Pero para camuflar la actividad ilegal, los menonitas dejaron una especie de cerco de árboles en el área deforestada, para que no se notara que arrasaron con la vegetación y de paso con animales como el jaguar.

“Se va a verificar y ya habían tumbado todo el centro, nomás habían dejado árboles a la orilla para que no se notara que estaban trabajando ahí y ya lo habían quemado, para cambiar el uso de suelo y convertirlo en terreno para monocultivo.

“Entonces, tapan la sabana, tapan la zona inundable, hacen drenes para que el agua y las corrientes pues no afecten su cultivo y al día de hoy hay soya ahí.

“Se pusieron denuncias, se pusieron sellos de clausura, pero no pasó nada. O sea, no avanzamos más del sello”, lamenta con tristeza Minneth Medina.

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Hay que que aplicar la ley, sugiere

Y es que considera que ante el panorama desalentador de grupos que expolian los recursos, sancionar es esencial y resarcir los daños, porque eso inhibirá prácticas perjudiciales, ya que la impunidad manda un mensaje de que no pasa nada y se persista en continuar con los daños.

“Entonces, creo que el panorama actual, lamentablemente, no es tan alentador, porque además el uso de agroquímicos, porque es un monocultivo, la fumigación o formas de fumigar que están utilizando, el manejo de fuego inadecuado, el cambio de uso de suelo sin permisos, o sin las autorizaciones correspondientes.

“Y lo que también se provoca, o lo que también se visibiliza, es que si no hay aplicación de la justicia en estos casos, otros más viene y lo hacen.

“Porque dicen ‘si los menonitas no les pasa nada, pues a mí por qué‘. Entonces también hay mayor riesgo de entrada de otros mecanismos extensivos o monocultivos por falta de aplicación de la ley”.

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Tienen la esperanza de que ahora sea diferente

Sin embargo la directora de la JibioPuuc pasa del desconsuelo a la esperanza, pues dice que su expectativa es que con la actual administración, el organismo que depende la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), ahora sí sancione a quienes incurran en prácticas que dañan al medio ambiente.

“Yo tengo mucha esperanza que con esta administración, o con estos operativos que Profepa ha promovido más puntuales, si podamos, si no erradicar, por lo menos detener su crecimiento (de la afectación al medio ambiente)”.

Sufren consecuencias de incendiar grandes extensiones en Yucatán

Pero las consecuencias en esta zona del sureste mexicano ya se resiente, sobre todo con el paso de huracanes y fenómenos meteorológicos, explica.

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“Entonces sí, está pasando ahorita, por ejemplo, que las comunidades vecinas a estas áreas donde estaban las sabanas, donde había aguadas o zonas frágiles como estos, viene una lluvia y se inundan, porque ya no hay zonas de captación o zonas importantes donde esta agua antes permanecía.

“Y empezamos a ver más problemáticas de cambio climático”, apunta Medina García .

“En 2020 cuando hubo las inundaciones de (los huracanes) Cristóbal y Amanda, toda esta zona se inundó. O sea, llegaron hasta copa de árboles, el agua, toda esa zona de producción porque, dejó de ser permeable el suelo, dejó de haber resiliencia climática y provocó pérdidas y muchos daños, no solamente a ellos como productores, sino incluso a las comunidades vecinas.

Menonitas quemaron 350 hectáreas de selva maya en Yucatán

Hay que recordar que, de acuerdo con la Profepa, esta dependencia, la Guardia Nacional, el Ejército mexicano y la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Yucatán, recorrieron el paraje San Diego Buenavista, Tekax, el pasado 13 de junio, luego de denuncias ciudadanas.

En ese lugar constataron la tala ilegal que realizaron menonitas en una superficie de 350 hectáreas:

“La vegetación natural fue reemplazada por un terreno nivelado, donde se aprecia el corte, derribo, seccionado y eliminación por fuego de arbolado adulto, arbolado joven o renuevo y vegetación herbácea que crecía en el sitio”.

Previamente, en 2024, medios locales en Quintana Roo reportaron un gran incendio forestal cerca de la reserva protegida de Bala’an K’aax, en la parte que corresponde a ese estado, que pudo ser provocado por menonitas, el cual devoró árboles y vegetación en una extensa área de terrenos en las inmediaciones del ejido de Piedras Negras.