Muchos aficionados que generalmente se encuentran en las butacas del Parque Kukulcán se resignaron a despedirse. La gran mayoría cree que el del jueves pasado fue el último partido de los Leones de Yucatán en casa.
Otros, muchos también, confían en que los Leones lograrán la hombrada de despertar y meterse a la postemporada.
Las fieras entraron a la jornada de ayer, en Puebla, esperando un verdadero milagro que les haga reaccionar para comenzar una remontada. Lo hecho en el diamante ha sido muy pobre. En la temporada casi todo ha sido inestable y por ello los aficionados creen que la campaña debe terminar porque en la postemporada, si pasan, será otra vez como el año pasado, en que calificaron al playoff, en la primera ronda fueron el mejor perdedor y luego los barrieron los Diablos Rojos.
El jueves, sin bateo (solo conectaron tres hits), y a pesar del descontrol del pitcheo emplumado (12 bases), los Leones no aprovecharon nada y cayeron 7-1 en uno de muchos juegos abúlicos del equipo de casa.
El mismo presidente ejecutivo de los Leones, Erick Arellano, calificó de fracaso lo que vivieron los melenudos, que, dijo: “Ya lo han visto todos, lo que yo veo es lo que ven ustedes, así es esto”.
Ciertamente, así es el béisbol. Pero la directiva, con los hermanos Arellano, o la gerencia deportiva, con David Cárdenas Cortés, no se han manifestado sobre el por qué aguantaron tantas cosas que se han vivido, entre jugadores de pobre rendimiento, peloteros que llegaron sin tener los argumentos beisbolísticos para formar parte de los Leones.
Eso fue algo de lo más comentado por los aficionados, en el parque, en las redes sociales, en cualquier lado donde se hable de los Leones. Y más letal fue para casi todos el que, durante el último juego del rol regular, el jueves ante el Águila, en las pantallas gigantes del Kukulcán, aparecieron anuncios de la venta anticipada de abonos y boletos para… la próxima temporada.
Reacciones
Ayer la reacción fue más severa porque los Leones en sus redes sociales bombardearon con ese tema. La reacción generalizada fue que los mismos melenudos se dieron por eliminados, vendiendo boletos para la venidera campaña, en vez de alentar, al menos, la expectativa de seguir con vida en este rol.
“Leones de Yucatán da a entender que ya dio por muerta esta temporada. Con qué ánimo voy a querer comprar eso después del resultado de esta temporada”, escribió en las redes sociales del club el aficionado José Ignacio Torres Balam.
Y así muchos más.
Tras el juego, se abrieron las puertas a los aficionados para bajar al terreno de juego, dinámica que ha alentado el retorno de muchos, pues durante varios años se dejó de hacer.
Los fans querían ver a sus ídolos, los Leones y se formaron frente al dogaut esperando que salieran. Se vio a dos solamente atendiéndolos, Gilberto Vizcarra, uno, y otro, como ha hecho siempre, Yadir Drake, quien se pasó largos minutos firmando autógrafos y tomándose fotos.
Por como jugaron anoche en Puebla, en el primero de la serie ante los Pericos, si ya es verdaderamente difícil que puedan meterse a los playoffs. El Kukulcán, que a muchos está gustando por sus remozadas instalaciones, ya prácticamente no encenderá sus luminarias otra vez para recibir al béisbol. Casi un hecho el adiós una década sin faltar a la fiesta de la postemporada y todo se derrumbó en un par de años, desde Kanasín en 2024, para el olvido.
Yucatán, sin alma ante Puebla; va Piratas al playoff
Los Leones, con una tibia reacción que no les bastó, terminaron poniéndole un clavo más al ataúd de su temporada más desastrosa en una década.
Los Pericos de Puebla no pasaron muchos problemas para derrotar a los melenudos, 6-3, en el arranque de la penúltima serie de la temporada regular, este viernes en el Estadio “Hermanos Serdán” de la Angelópolis.
Yucatán, con esta derrota, vio caer su récord a 38-49, con cinco partidos por jugarse en el rol regular. En la jornada, los Olmecas de Tabasco perdieron igual y se quedaron en 40-26, mientras que ganó el Águila de Veracruz (42-45) ante los Piratas de Campeche (44-42) y puso sus números en 41-45, y los Bravos de León (38-47) ganaban ante los Guerreros de Oaxaca (48-38).
Y así las cosas, al corte de anoche la tabla iba de la siguiente forma en la Zona Sur, comandada por los Diablos Rojos (verdugos de los Olmecas): Oaxaca segundo, Piratas tercero, Puebla cuarto (los cuatro ya clasificados), Veracruz quinto, Tabasco sexto, León séptimo y los Leones en octavo.
Los Piratas se metieron a una postemporada por primera vez en una década. Ironías de épocas: los Leones se van a quedar fuera de los playoffs por primera vez en diez años.
Anoche se vieron otra vez desangelados. Vladimir Gutiérrez los atornilló en cuatro hits en seis entradas y dos tercios, aceptando dos carreras que impulsó Webster Rivas en la séptima. En la novena, Art Charles bateó un jonrón de 512 pies.
Pese a que Puebla es un paraíso para los bateadores, los Leones no lo aprovecharon, pues dispararon solamente cinco hits. En dos juegos, han conectado solamente ocho inatrapables.
Con un día más de descanso, el panameño Darío Agrazal colgó tres ceros, luego se desplomó y explotó


