Los Diablos Rojos son los Diablos Rojos. Tristemente para Yucatán, los Leones de este año no se ve tengan argumentos para pelearles.
Los pingos pusieron tierra de por medio en un segundo juego que iba equilibrado ante los Leones de Yucatán y convirtieron en paliza la tarde que puede marcar diferencias en la serie.
Leones de Yucatán pierde por paliza ante Diablos Rojos
El score final fue 12-1, pero igual que la jornada anterior, se abrió con un racimo grande en la recta final.
Aspecto del partido de Leones de Yucatán ante los Diablos Rojos, que ganaron por paliza (foto de cortesía) Aspecto del partido de Leones de Yucatán ante los Diablos Rojos, que ganaron por paliza (foto de cortesía) 
Aspecto del partido de Leones de Yucatán ante los Diablos Rojos, que ganaron por paliza (foto de cortesía) Aspecto del partido de Leones de Yucatán ante los Diablos Rojos, que ganaron por paliza (foto de cortesía) 
Aspecto del partido de Leones de Yucatán ante los Diablos Rojos, que ganaron por paliza (foto de cortesía)
Los melenudos ofrecieron una de sus actuaciones más débiles en muchos años en postemporada y, con un bateo de solamente seis hits, más un pitcheo que obsequió 13 pasaportes, se exhibió feo en el Estadio “Alfredo Harp Helú”.
Y como la víspera, los campeones defensores solamente aprovecharon.
Diez carreras en la séptima entrada
Un ataque de diez carreras en la séptima entrada fue fundamental en el juego. Allí, el México sacó provecho del mal papel de los relevistas, que firmaron siete transferencias.
La serie viaja ahora al Parque Kukulcán para los Juegos 3 y 4, con los melenudos encomendando todo a sus dos principales abridores, César Valdez y Yoanner Negrín. El México irá con calma en una batalla que ya tienen ganada a la mitad.
