“Yo los protegeré ahí siempre. En su mundo tengo otro nombre, deben aprender a conocerme por él. Ésa fue la razón de que vinieran a Narnia, al haberme conocido, también sabrán buscarme allá” (“Las crónicas de Narnia: El Viajero del Alba”)
Esta declaración es una de las más conocidas de “Las crónicas de Narnia”. En el libro “La travesía del Viajero del Alba”, el gran Aslan se despide de los pequeños Pevensie y les advierte que siempre los cuidará, ya que, en el mundo real, él es conocido por otro nombre: Jesús.
El autor C.S. Lewis decidió crear una saga literaria basada en su fe cristiana. Tiempo después, algunas de sus obras fueron adaptadas a la pantalla grande y, aunque se pueden ver en cualquier momento de la vida, en fechas como éstas adquieren especial relevancia, pues tienen una peculiar característica: se enfocan en la Biblia.
Y ésta no es la primera producción del séptimo arte que adapta historias bíblicas o de la vida de Jesús, pues ya existe todo un género dedicado a ello: el espiritual y/o religioso. Aunque estos filmes pueden ser vistos en cualquier temporada, obtienen una mayor relevancia durante la Semana de la Pascua o la Semana Santa.
Los canales de televisión abierta e, incluso, el cine se disponen a transmitir o estrenar títulos que abordan la espiritualidad; algunos son ya títulos conocidos y otros más son una bocanada de aire nuevo. A continuación nombramos algunos de ellos:
Las clásicas
“La Pasión de Cristo” (2004). Dirigida por Mel Gibson, es catalogada como una de las películas más crudas y reales sobre lo que padeció Jesús e incluso acaparó titulares en los medios de comunicación por su gran impacto visual.
Es uno de los filmes obligados de ver en esta temporada. La película se basa en los Evangelios y relata las últimas doce horas de la vida de Jesús de Nazaret, hasta su crucifixión.
“Ben-Hur” (1959). Una de las películas más clásicas que no puede faltar y que tiene dos adaptaciones (1925 y 2016). La primera fue dirigida por William Wyler y protagonizada por Charlton Heston. Esta épica cinematográfica cuenta la historia de Judá Ben-Hur, un príncipe judío que se enfrenta a la ira de un amigo de la infancia convertido en tribuno romano. Con una duración de tres horas y media, ganó 11 premios Óscar y es una auténtica joya del cine. Es considerada una de las películas más espectaculares de la Historia y un filme de culto, cuya premisa se centra en la redención y el perdón que Jesús da a las personas que tienen un encuentro con él.
“Los diez mandamientos” (1956). Otro filme clásico de Semana Santa y que es muy bien recordado por sus tres horas de duración. Es la historia de la liberación de los judíos de Egipto, desde la crianza de Moisés como hijo del faraón hasta la entrega de las tablas de la ley por Dios al pueblo de Israel. Este filme contó con la participación en el papel protagónico de Charlton Heston, mismo de “Ben-Hur”.
“El Príncipe de Egipto” (1998). Una película que tampoco pasa desapercibida en esta semana es “El Príncipe de Egipto”, con la que DreamWorks entrega una verdadera joya de la animación con un doblaje latino excelente y con temas musicales que tocan las fibras sensibles de los espectadores. El filme no solo está dirigido a los niños sino también a los adultos.
“El Arca de Noé” (1999). Es una miniserie para televisión de dos episodios. Las ciudades gemelas de Sodoma y Gomorra son el epicentro del pecado y la degeneración. Por ello, Dios advierte a Noé que tome a su familia y se aleje de ellas. A pesar de las advertencias que el patriarca hace a la gente para que siga sus pasos, solo Lot, su mejor amigo, lo hace. Algunos años después, Dios le da instrucciones a Noé para que construya un gran barco para transportar una pareja de animales de cada especie, ya que Sodoma y Gomorra están a punto de recibir el castigo divino. Tras el Diluvio Universal, que duró 40 días, el Arca se posó en la cima del Monte Ararat, donde el género humano tendría una segunda oportunidad para empezar de nuevo.
Abordan a Jesús o el cristianismo
“El caso de Cristo” (2017). Basada en la historia real del galardonado periodista, investigador y ateo declarado Lee Strobel, quien aplica sus habilidades periodísticas y legales para desacreditar la nueva fe cristiana de su esposa para salvar su matrimonio que se desmorona. Lee se encuentra cara a cara con resultados inesperados que podrían cambiar todo lo que cree que es verdad. Lee Strobel es ahora un apologeta cristiano, ha publicado una veintena de libros, además de contar con varios premios.
“Pablo, apóstol de Cristo” (2018). Cuenta con la actuación de Jim Caviezel (“La Pasión de Cristo” y “Sonido de libertad”) como Lucas. El filme es un relato breve de la violenta persecución de los cristianos en la primera etapa de la Iglesia, y un acercamiento a la relación de Lucas, autor de uno de los Evangelios y a quien se atribuye el libro de los Hechos de los Apóstoles, con Pablo. La película es una reflexión de esta parte de la vida del apóstol, ya en la vejez, y el final es sorprendente, con un mensaje profundo sobre el perdón y la redención eterna.
“Hasta el último hombre” (2016). Dirigida por Mel Gibson y protagonizada por Andrew Garfield, la película está basada en la historia real de Desmond Doss, soldado del Ejército de Estados Unidos y un cristiano adventista del Séptimo Día que se negó a portar armas en el frente y fue objeto de burla y persecución.
A pesar de ello, fue condecorado con la Medalla de Honor por el presidente Harry S. Truman por haber salvado la vida a setenta y cinco hombres bajo el constante fuego enemigo en el acantilado de Maeda, durante la brutal batalla de Okinawa, en la Segunda Guerra Mundial.
“Jesús Revolución” (2023). La película narra la historia de un despertar espiritual en Estados Unidos, que comenzó en una comunidad de adolescentes hippies en el sur de California y se extendió por todo el país.
También llamado “Movimiento de Jesús”, ganó fuerza después de que un grupo de hippies liderado por Lonnie Frisbee (Jonathan Roumie) conociera a un pastor llamado Chuck Smith (Kelsey Grammer) quien les abrió las puertas de su iglesia —ávida de nuevos integrantes— Calvary Chapel a jóvenes errantes con la esperanza de acercarlos a Dios. El llamado Movimiento de Jesús combinaba la contracultura de la década de 1960 y la actitud de la década de 1970 con el cristianismo evangélico.
“La Resurrección de Cristo” (2016). Protagonizada por Joseph Fiennes (“Lutero”) y Tom Felton (la saga de “Harry Potter”), la historia nos sitúa en el Jerusalén del siglo primero de la era cristiana, días después de la muerte y resurrección de Jesucristo. En la ciudad no se habla de otra cosa y por ello Poncio Pilato manda a Clavius, un centurión romano agnóstico, a que investigue la realidad de lo que había sucedido. La misión que le encomiendan consiste en localizar el cuerpo desaparecido de Jesús de Nazaret para zanjar el tema de una vez por todas. Sin embargo, a lo largo de la misión las dudas aumentan en el centurión respecto a la existencia de lo sobrenatural y se verá enfrentado a los apóstoles, otros personajes bíblicos y los misteriosos acontecimientos que tuvieron lugar después de la crucifixión.
“Las crónicas de Narnia” (2005, 2008 y 2010). Dedicado a un público juvenil, aunque también adulto; la saga gira en torno a las aventuras de unos niños en el mundo ficticio de Narnia, guiados por Aslan, un león parlante y el verdadero rey de Narnia. La mayoría de los niños destacados fueron los hermanos Pevensie y la antagonista destacada fue la Bruja Blanca. Si bien las películas siguen la trama de la novela tradicional y los temas cristianos, también se añade la mitología griega y los cuentos de hadas británicos.
Aunque existen más títulos de productoras seculares y cristianas, éstos son algunos de las más destacados. Mención aparte merecen las decenas de películas que se enfocan principalmente en la vida de Jesús, extranjeras y mexicanas.
A ellas se suman otras producciones realizadas en formato serie, como “José de Egipto”, “Moisés y los diez mandamientos”, “El Rey David” y “Los Elegidos”.
El séptimo arte no solo se enfoca en temas sociales, de ciencia ficción y drama, también busca centrarse en la espiritualidad humana, ya sea de corte evangélico o de otra denominación, con lo que se puede elegir qué ver para fortalecer la fe.— Eunice Cruz Molina