Un buen número de personas aprovechó el Sábado Santo para pasear en el centro de Mérida, realizar compras o viajar al puerto de Progreso u otras playas cercanas a la capital.
El movimiento en las calles del Centro comenzó desde muy temprano , aunque no fue tan copioso como en otras épocas del año, cuando en las aceras apenas dejan de transitar personas o el tráfico parece no avanzar.
Aún así, a las 8:30 de la mañana ya era posible ver a gente realizando compras en los mercados Lucas de Gálvez y San Benito , y sus alrededores . También se vio a una cantidad considerable que bajó al parque Eulogio Rosado a tramitar su tarjeta de transporte con tarifa social.
Viajeros a Progreso desde Mérida
Por otro lado, a esa misma hora ya se había formado una fila de hombres y mujeres de diferentes edades en la terminal de autobuses de Autoprogreso . La cola, que comenzaba en el interior de la terminal salía a la calle.
Aunque no con la misma cantidad de pasajeros, también se pudo observar movimiento en la terminal de taxis al puerto.
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Entre las 9 y 10 de la mañana conforme la mayoría de las tiendas levantaron sus cortinas, se pudo ver a más personas comprando ropa , zapatos u otros artículos, aprovechando que a esa hora aún no había tanto calor .
Quizá por ello se pudo ver a varios turistas paseando por el Centro. Algunos se tomaron fotos en las letras turísticas de Mérida, otros esperaban turno en el turibús y unos más escuchaban atentos las explicaciones de los guías de turistas.
Turistas en la Plaza Grande
Asimismo, se vio a visitantes caminar entre los puestos de artesanías de la Plaza Grande, preguntado por los precios de la ropa típica, de collares y otros accesorios.
También se pudo ver a gente ingresar a la exposición “El lenguaje de las plantas”, que la semana pasada inauguró el Ayuntamiento en el Pasaje de la Revolución, a un costado de la Catedral.
Algunos decidieron caminar más allá del primer cuadro, llegando al bazar de artesanías “García Rejón” donde, contrario a otros días, no todos los puestos estaban abiertos. A los que les fue bien fue a los de comida, por ejemplo, en uno de tacos, tortas y panuchos hubo gente comiendo de pie.
Para las 10 de la mañana el tráfico seguía fluido y sin tanto amontonamiento en las calles, a pesar de ser un fin de semana de quincena. IVÁN CANUL EK/AGENCIA INFORMATIVA MEGAMEDIA