El desbalance en la dieta de perros y gatos podría ocasionar deficiencia o excesos nutricionales, lo que desencadenaría varias enfermedades
El desbalance en la dieta de perros y gatos podría ocasionar deficiencia o excesos nutricionales, lo que desencadenaría varias enfermedades

Aunque alimentar a nuestras mascotas, como perros y gatos, con comida casera puede parecer una opción más económica o natural que les favorecerían, hacerlo sin supervisión profesional podría poner en riesgo su salud.

Al respecto, el médico veterinario zootecnista Antonio Ortega Pacheco, profesor del Departamento de Salud Animal y Medicina Preventiva de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), abordó este tema con claridad y destacó la importancia de una nutrición balanceada en las mascotas para evitar complicaciones que muchas veces conlleva no tener un control en la dieta.

Explicó que, al igual que los seres humanos, los animales tienen necesidades nutricionales específicas que varían según su edad, peso, estado fisiológico y nivel de actividad. Pese a que la alimentación casera no está prohibida, si no se formula adecuadamente puede provocar deficiencias o excesos nutricionales.

“Muchas personas no siguen las indicaciones correctas. Hay quienes les dan comida casera sin saber cuánta proteína, energía o nutrientes están consumiendo sus mascotas. Esto puede derivar en desnutrición o, en su caso, obesidad, ya que también implica medir porcentajes de lo que se les da”, advirtió el especialista.

Asimismo, señaló que los alimentos procesados, como las croquetas, están formulados con bases científicas y no representan un riesgo si se administran en las cantidades recomendadas.

“Cada alimento comercial incluye tablas con la cantidad de proteínas, calorías y porciones sugeridas, pero pocas personas las consultan”, lamentó.

Sobre la comida casera, subrayó que no es dañina si se utilizan ingredientes adecuados —como arroz, huevo, carne o pescado— y se logra un buen balance. No obstante, reiteró que debe hacerse bajo la asesoría de un veterinario, quien puede calcular con precisión las cantidades de cada nutriente.

“Se necesita conocer cuánta energía o proteína tiene cada alimento. Para eso usamos tablas especializadas que nos permiten diseñar una dieta personalizada”, indicó.

Finalmente, recalcó la importancia de mantener agua fresca siempre disponible, especialmente si la dieta se basa en croquetas, para evitar problemas como el estreñimiento.

“Si queremos una mascota sana, la alimentación es tan importante como las vacunas o la desparasitación. La clave está en informarse con un veterinario, respetar las cantidades, los horarios y mantener una rutina. Eso contribuye significativamente a su bienestar”.