Con una trayectoria de cinco décadas, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) delegación Yucatán se ha consolidado como un pilar del desarrollo económico y urbano de la entidad.
Desde sus inicios en 1975, ha evolucionado hasta convertirse en una organización clave que impulsa la capacitación, la innovación y la vinculación entre el sector público y privado.
La CMIC, un pilar de desarrollo en Yucatán
“La CMIC es una cámara que alberga a empresas con formación y capacitación para poder generar una competencia y poder fortalecer el sector”, afirma su actual presidente, Alberto Canul Moguel, al resaltar la visión con la que fue creada esta institución.
La historia de la cámara en México comenzó en 1953, bajo el liderazgo del ingeniero Bernardo Quintana.
En Yucatán, los primeros pasos se dieron en 1959 con una oficina de representación que más tarde dio origen a la delegación local, constituida formalmente el 20 de junio de 1975.

El primer presidente de CMIC Yucatán fue Alberto Gutiérrez Trejo. En sus comienzos, contaban con apenas 35 socios, pero hoy suman 268 afiliados que comparten un compromiso común: construir un Yucatán más competitivo y preparado.
Además de ingenieros y arquitectos, la cámara integra a empresarios con vocación constructora. “No necesariamente tienes que tener un título profesional para ser un constructor”, señala Canul Moguel.
Grandes logros: el Instituto de Capacitación de la Industria de la Construcción
Uno de los principales logros de la CMIC Yucatán es su Instituto de Capacitación de la Industria de la Construcción, fundado en 1988.
“En la delegación de Yucatán se ha formado y capacitado a más de 16,000 obreros de la construcción”.
Este centro, considerado el más grande de Latinoamérica en su tipo, ofrece cursos básicos, especializados y tres maestrías: en Administración de la Construcción, Gerencia de Proyectos y Vías Terrestres.
Además, cuenta con infraestructura moderna que incluye un auditorio, dos salas de cómputo y cinco salones.

El lema del instituto, “capacitar es construir”, resume su misión de fortalecer al sector desde la base.
“Podemos ir físicamente al lugar donde se está realizando la obra y allá dar los cursos de capacitación”, explica Canul Moguel, destacando el enfoque práctico del instituto.
Alianzas estratégicas
La cámara también participa activamente en comisiones mixtas con el gobierno estatal, donde se intercambian puntos de vista y se plantean propuestas.
“Levantamos la mano y damos nuestro punto de vista”, comenta el presidente de la delegación.
Además, la CMIC tiene relación directa con dependencias como el IMSS, el SAT y la Secretaría del Trabajo, fomentando el cumplimiento legal y administrativo de las empresas afiliadas.
La dimensión social también está presente a través del Comité de Damas que organiza apoyos y visitas a comunidades.
Uno de los elementos que más enorgullece al líder de la CMIC en Yucatán es el temple de los trabajadores.
“Tenemos verdaderos titanes que son los obreros de la construcción, que marcan una gran diferencia en esfuerzo y dedicación. No cualquiera aguanta un clima de 55 grados de sensación térmica”.
Esta resistencia, dice, es herencia de una tradición constructora milenaria: “Nuestros constructores mayas fueron un gran precedente a nivel mundial de lo que es ser un buen constructor”.
Primera Expo Construcción y grandes obras
En 1998, la delegación lanzó la primera Expo Construcción, un evento anual que ha ganado relevancia como escaparate de innovación, productos y tecnología para el sector.
Otro logro, destaca Canul Moguel, es que el Puerto de Altura, una de las obras más emblemáticas de Yucatán, fue construida por un socio de cámara. Pero también han participado en numerosos proyectos relevantes para el desarrollo del estado.
La CMIC, subraya el entrevistado, tiene como misión representar y defender los intereses de los industriales de la construcción, liderar la cadena de valor y brindar servicios innovadores que impulsen una industria sustentable.
Su visión es incidir en la política de infraestructura y ser motor de crecimiento.

En un contexto de inversión creciente, Canul Moguel considera que Yucatán es atractivo por su seguridad y su gente trabajadora.
“Realmente hemos atendido dentro de este lugar en el cual habitamos una convivencia que hoy la presumimos y la queremos seguir teniendo”.
La participación de las mujeres también cobra fuerza dentro del gremio, con cada vez mayor presencia en el ámbito constructivo y académico.
Finalmente, Canul Moguel reconoce que la industria ha enfrentado crisis económicas, pero destaca que esos retos han fortalecido al sector.
“El sector de la construcción es un indicador de crecimiento de la economía. Hemos tenido periodos muy difíciles, pero estas crisis nos ayudan a ser mejores y también a ser más competitivos. Los retos siempre van a existir, y nuestro sector es uno que tiene altas y bajas de acuerdo a la economía del país”.

