Concesionarios del transporte urbano de pasajeros, entre ellos Nerio Torres Ortiz, durante una protesta en el Palacio de Gobierno en 2012
Concesionarios del transporte urbano de pasajeros, entre ellos Nerio Torres Ortiz, durante una protesta en el Palacio de Gobierno en 2012

Casi 20 años después de dejar el poder, el exgobernador panista Patricio Patrón Laviada se disculpó con el líder del Frente Único de Trabajadores del Volante (FUTV), Nerio Torres Ortiz, por la ofensiva de su gobierno (2001-2007) en contra de esa organización, no obstante las muestras de apoyo que ésta le dio al mandatario.

En su gestión Patrón Laviada propició la creación de cooperativas de taxistas para restarle influencia al Frente, considerado un brazo operador del PRI, e impulsó auditorías a sus dirigentes.

Todo esto se hizo, recuerda Torres Ortiz, pese a que unos meses después del arribo de Patricio al gobierno “le organizamos un desayuno de apoyo, en el que cientos de taxistas lo recibimos de pie, con aplausos”.

En la séptima y última parte de una entrevista con Diario de Yucatán, Torres Ortiz, un personaje de la política yucateca de los últimos 50 años, recuerda que luego del triunfo de Patricio Patrón sobre el priista Orlando Paredes Lara, lo visita en Palacio de Gobierno y le dice: “Patricio, yo juego béisbol y aquí se pierde o se gana por una carrera. Reconozco que ganaste y queremos ponernos a tu disposición y ofrecerte nuestro apoyo en todo lo que beneficie a los yucatecos”.

—¡Qué bueno, Nerio! —me contesta— ¡Me parece muy bien!

—Cada quien permanecerá en su trinchera —porque no me voy a pasar al PAN— pero voy a respetar lo que hagas como gobierno, y así se lo dije en un desayuno delante de 300 delegados del Frente de todo el estado, que lo recibieron de pie, como si no hubiera pasado nada.

Tráfico de placas

—Sin embargo, a las pocas semanas —añade Torres Ortiz— empezamos a notar un cambio de actitud, no de él, sino de sus funcionarios, principalmente del secretario general de Gobierno, Pedro Rivas Gutiérrez. Él era el más duro, el que ejecutaba las decisiones en nuestra contra.

De acuerdo con el entrevistado, el gobierno panista aprovechó una pequeña disidencia dentro del FUTV, “de 18 personas, no más, encabezadas por Guillermo del Río Puga”.

—Con estas y otras personas, el gobierno creó la primera cooperativa de taxis fuera del FUTV, Radio Taxímetros de Yucatán, encabezada por Del Río, que al poco tiempo, por pleitos internos, se dividió en dos o tres cooperativas más.

—Cuando llega Patricio llegan también las auditorías, para responder a las acusaciones de que ¡Nerio Torres se ha enriquecido en el FUTV!, como decían los disidentes. El gobierno nos hizo varias auditorías y también una el SAT, pero no pasó nada. Lo que sí pasó es que ese Del Río terminó en la cárcel, por traficar las placas.

—Una diferencia entre nosotros y esas cooperativas —explica Torres Ortiz— es que en el Volante cada socio es dueño de su placa y de su concesión. Cuando Patricio Patrón repartió las nuevas concesiones, lo hizo a nombre de las cooperativas, no de las personas, lo que permitió a dirigentes, como Del Río, pedir dinero a cambio de las placas. ¡Eso sí es corrupción!

—Yo pienso que engañaban a Patricio Patrón, haciéndole creer que ese muchacho (Del Río) podría tener la gente suficiente para derrotarme. Al final, él y su grupo fueron expulsados del Frente.

¿Cómo enfrentó el FUTV esta ofensiva?

Supimos capear las cosas para que no nos fuera tan mal. Le hice ver a los socios la inoperancia de los sitios y creamos una central de radio de taxímetros, con lo que bajaron las tarifas y empezamos a nivelar la balanza. También vendimos la gasolinera del FUTV e hicimos una inmobiliaria para dar crédito a los socios interesados en comprar un automóvil, ya que Patricio negó el aval del gobierno.

¿Esto afectó su salud?

Sí. En esa época, precisamente, me dio hipertensión y diabetes, con las que aún lucho todos los días, pero a propósito de ese período, quisiera platicarle algo que, pienso, es importante y no lo he contado antes: hace un año aproximadamente, un taxista va a mi casa y me pregunta si me importaría tomar un café con Patricio Patrón. ¿Él lo pide?, le digo. ¿Para qué? Ni él es gobernador ni yo secretario general del Frente. No lo sé, solo me pidió que te dijera…

Las disculpas a Nerio Torres

—Acordarnos vernos en Chapur Norte. Patricio llegó con Pedro Rivas. Nos sentamos a la mesa y me dijo: ¡debes estar extrañado de la invitación! La verdad, sí, le respondí. No veo el motivo.

—Mira —me dijo— en mi gobierno me propuse hacer diez puntos. De esos, ocho me salieron bien y dos mal, uno de ellos fue haberme peleado contigo, no debí hacerlo.

—Tú, de buena fe, me abriste las puertas del Volante y yo, de mala leche, le hice caso a mis colaboradores y, bueno, la historia todos la conocemos: aparentemente yo gané, porque tenía la fuerza del gobierno, pero también me llevé muy buenos macanazos al subirme al ring contigo (dos o tres plantones de protesta en Palacio).

—Pasó el tiempo y me di cuenta que no iba a estar tranquilo si no te decía esto: te ofrezco una disculpa por lo que pasó y quisiera que no me guardes rencor…

—Para nada —le dije. Nos dimos la mano y terminamos el café.

Según Nerio Torres, a los pocos días Pedro Rivas lo invitó a él y a otros taxistas a su despacho, en la García Ginerés, a donde llegó también Patricio, quien repitió la disculpa que ya le había expresado a Nerio, y dijo que quería también presentársela a los compañeros.

Para finalizar, ¿de dónde proceden sus ingresos en este momento si no maneja su taxi?

Recibo una retribución por la renta de la única concesión de placa del FUTV que poseo y que heredé de mi papá. También tengo un ingreso por mi actual labor en la Secretaría de Seguridad Pública.

—El dinero nunca ha sido algo que me mueva. El mejor ejemplo es que jamás he tenido una vida ostentosa y quienes me conocen lo pueden corroborar.

—Mi auto es un Nissan 2012 y vivo en la misma casa (en el fraccionamiento Montejo, cerca de la Prolongación), desde hace 50 años. Siendo un niño a quien dieron en adopción, mi riqueza la puedo medir en la felicidad de formar una familia que adoro, conformada por mi esposa, mis tres hijas y mi hijo, así como yernos, nuera, nietos y hasta bisnietos.

Camionetota

(Su hijo Nerio Torres Arcila, presente en la entrevista, informó que en la familia “estamos viendo cómo pagar los gastos médicos de mi papá, porque no tiene IMSS o Issste”).

Alguna vez se publicó que usted tenía una mansión en la playa…

Eso fue otra ofensa del periódico. Tengo una modesta casa en Chuburná, de dos recámaras, pero un día publican la foto de una casa de tres pisos con este título: “Residencia de playa de Nerio Torres”, una información totalmente falsa. Pero, esta vez el Diario me dio la oportunidad de aclarar esa mentira.

Cada vez que salía como candidato, sus enemigos lo acusaban de tener muchas placas de taxi a su nombre…

¡Averiguarlo es tan fácil! Vaya al FUTV y pregunte ¿cuántas placas tiene don Nerio Torres? Yo no sé si ahorita mismo le vayan a dar el dato, aunque el registro de placas y concesiones debe ser público.

Muchos dirigentes de taxistas tienen varias placas a su nombre o al de su esposa, hijos, yernos, nueras, padres…

Así está actualmente, pero le repito: no tengo casa en Altabrisa ni autos de lujo o camionetotas. Para camionetota, la que se compró la tesorera del Volante en la anterior directiva. ¡Esa sí es camionetota!