CIUDAD DE MÉXICO.- Este jueves, en su acostumbrada rueda de prensa matutina, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que no sabía cuándo viajará a México la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, para abordar el asunto de la crisis migratoria, sin embargo, aseguró que “será bienvenida”.
“Sí la invité pero no sé si ya decidió hacer alguna visita a México. Será bienvenida a nuestro país, pero tiene que ver con su agenda y con la estrategia que están siguiendo“, expresó el mandatario.
Causas de la migración
Ayer miércoles, la vicepresidenta estadounidense dijo que planea viajar pronto a México, Guatemala y posiblemente a otros países de Centroamérica para hablar sobre cómo “hacer frente a las causas de raíz” que generan la inmigración irregular hacia EE.UU.
Por otra parte, el pasado 7 de abril, el presidente López Obrador tuvo un primer contacto telefónico con la vicepresidenta Harris, quien ha recibido del presidente Joe Biden la misión de coordinarse con México y Centroamérica para frenar la llegada masiva de indocumentados a la frontera sur de Estados Unidos.
“La invité a Chiapas, Tabasco y Campeche, los estados fronterizos del sur de nuestro país, para que se diera cuenta y conociera la experiencia que se tiene en apoyar a los pobladores“, dijo este jueves el presidente López Obrador.
Programas para frenar la migración
López Obrador sugirió que los programas de empleo y reforestación que se llevan a cabo en el sureste mexicano podrían aplicarse también en Guatemala, Honduras y El Salvador para frenar la migración forzada, pues son países “hermanos.”
El jefe del Ejecutivo mexicano dijo que también pretende tratar con Kamala Harris “el asunto de los niños y niñas” migrantes que emprenden la travesía solos y son captados por redes de tráfico de personas.
Cooperación México-EE.UU.
México, que coopera con Estados Unidos en la crisis migratoria, tiene desplegados 12,000 militares y funcionarios en el país para frenar el flujo.
El Gobierno mexicano dice estar “preocupado” por el incremento “notabiliísimo” de menores no acompañados, que en marzo fueron detectados 3,139.
La semana pasada, el Gobierno estadounidense reveló cifras récord de detenciones de indocumentados en su frontera con México, con más de 172,000 en marzo, entre ellos casi 19,000 menores, una cifra histórica.
La Casa Blanca ha insistido en que la frontera “está cerrada” y en que la mayoría de quienes lleguen sin documentos serán expulsados, pero eso no ha rebajado las llegadas a la zona limítrofe.
