VALLADOLID.— La profundidad del cenote que hace poco más de una semana se “tragó” una ceiba monumental sigue siendo un misterio: buzos realizaron una exploración en domingo pasado y, acuerdo con lo que se supo no lograron llegar al fondo de la oquedad.
Los exploradores, de acuerdo con los datos obtenidos, alcanzaron llegar a una profundidad de 40 metros, donde permanece la ceiba desplomada, distancia máxima a la que pudieron llegar.
De acuerdo con la información obtenida, los buzos se introdujeron al cuerpo de agua para explorar el espacio y conocer cuántos metros tiene de profundidad, sin embargo no lograron llegar hasta el fondo.
La ceiba monumental que se vino abajo, se indicó, está a unos 40 metros de profundidad, pero los buzos ya no pudieron avanzar más, y emergieron de nuevo.
Como se indicó poco después del desplome de la bóveda, se cree que el cenote podría tener más de 60 metros de profundidad.
Otros datos que salieron a relucir tras la incursión de los buzos fue que en las paredes del interior de la oquedad se pudieron observar las entradas a unas cavernas que se presume se conectan con otros cuerpos de agua, pero se ignora hasta dónde llegan.
El área donde quedó la boca del cenote continúa delimitada con cintas, y según algunos vecinos han visto a varias personas que se acercan mucho al hueco que se desplomó y corren constante peligro.
Exploran el cenote de Xocén
En su momento publicamos que vecinos que tienen sus casas a unos metros de la bóveda del cenote se llevaron un susto el pasado domingo 4 cuando escucharon el estruendo que se produjo por el desplome de una parte del techo del cenote, donde creció una ceiba que se fue dentro del agua y desapareció en sus profundidades.
El área donde quedó la boca del cenote continúa delimitada con cintas, y según algunos vecinos han visto a varias personas que se acercan mucho al hueco que se desplomó y corren constante peligro, tomando en cuenta que hay partes del techo que apenas tienen unos 30 centímetros de grosor, de modo que se puede venir abajo en cualquier momento.
Los vecinos consideraron que las autoridades estatales o federal deben intervenir lo más pronto posible para desarrollar algún proyecto turístico que beneficio al pueblo.
También comentaron que se debe tirar el resto del techo, antes que ocurra alguna desgracia que se lamente, debido a lo peligroso que resulta caminar en los alrededores.
