PROGRESO.— El arquitecto Mauricio Mier y Terán Calero expresa que sin diseño urbano y con desorden en la vialidad, que obliga a los conductores que habitan en el oriente de la ciudad, llegar hasta el centro para dirigirse a Mérida y al poniente causa caos vial: Progreso está infartado.
En su opinión, el uso del viaducto elevado debe ser obligatorio y gratuito para los tráileres, para que sin pretexto alguno lo usen y de esa manera dejen de transitar por las calles del Centro como lo han hecho durante un siglo.
De igual manera, considera, la calle 46 debe ser de doble sentido de la circulación como estaba hasta abril de 2024 y lo fue durante más de 30 años, hasta que las autoridades respectivas modificaron la vialidad y lo convirtieron de sur a norte, como vía alterna para los camiones de carga que se dirigen a la terminal remota, usando también la 25.
Viaducto, de uso gratuito
Mier y Terán Calero insiste en que si el viaducto elevado fue construido para el tránsito de los camiones de carga, que su uso sea obligatorio, pero gratuito, que no sea de cuota, de esa manera no habrá pretexto para que los transportistas exijan una vía alterna.
Que la construcción de esa obra lo paguen las autoridades y sea la autoridad portuaria la que lo opere, que su uso sea gratuito, de tal manera que sea obligatorio y los tráileres dejen de pasar por distintas calles de la ciudad, destruyendo las calles , afectando a cientos de familias con el ruido y contaminando el medio ambiente.
Mier y Terán Calero expresa que una vez que el viaducto entre en operación, de inmediato la calle 46 debe retornar a su antigua vialidad, de doble circulación, para que los conductores del oriente de la ciudad ya no tengan que llegar al centro de la ciudad para dirigirse a Mérida como ocurre desde mayo de 2024, cuando modificaron la vialidad en esa arteria (46) y la convirtieron en sentido de sur a norte.
También apunta que en caso que se habilite una vía alterna, deberá ser la 86 que hace más de 30 años que los tráileres utilizaron para entrar a la ciudad y dirigirse a la terminal remota y ahora lo usan para salir.
En opinión del arquitecto Mier y Terán Calero, la 86 es la calle ideal para que sea vía alterna para los tráileres, la afectación será menor para Progreso, tal vez se afecte a unas 200 o 300 familias, el gobierno las puede expropiar o comprar.
En cambio, en la 46 y la 25 la afectación es de poco más de 1,000 familias, además que la distancia es mayor, en la actualidad desde la entrada a la ciudad hasta el acceso al viaducto de la terminal remota, los camiones recorren unos 5,000 metros.
Usando el puente (viaducto elevado) los tráileres recorrerán unos 2,200 metros para entrar al puerto de altura, y en la calle 86 como vía alterna otro tanto similar, así que, indica Mier y Terán, las calles 46 y 25 deben ser descartadas como arterias de vía alterna para los tráileres.
Vecino de esta ciudad, indica que Progreso está para llorar, no hay amor a Progreso, hay basura por todas partes, la gente tira su basura en la calle porque no quiere a su ciudad, hay un desorden que debe corregirse comenzando con la vialidad, que los camiones pesados ya no transiten por todo el puerto y destruyan las calles como ha ocurrido en los dos últimos años, tiempo que lleva la construcción del viaducto elevado.
Los tráileres deben transitar sobre el viaducto elevado, apunta, y en caso de vía alterna que usen la 86 para entrar en la terminal remota y salir de la ciudad, hay espacio suficiente y se puede diseñar, hay arquitectos e ingenieros que pueden aportar su granito de arena para que Progreso sea una ciudad amigable y ordenada.
