La expansión de Internet y las redes sociales extienden la oferta de adolescentes en la prostitución masculina en Yucatán, afirma la Dra. Ligia Vera Gamboa, miembro del Centro de Investigaciones Regionales “Hideyo Noguchi”.
De tal modo que las nuevas tecnologías modificaron la actividad de quienes se dedican al trabajo sexual en Yucatán, propiciando que muchos de ellos, incluso adolescentes, ofrezcan sus servicios en esos medios, apunta.
Prostitución masculina en Yucatán: Internet extiende la oferta de adolescentes
En un estudio realizado en 2014, investigadores de ese centro y de otras instituciones confirmaron esta tendencia y detectaron algo nuevo: la presencia de adolescentes varones ejerciendo el comercio sexual con otros varones, explica la investigadora.
A raíz de esto, la Dra. Vera Gamboa y el antropólogo Miguel Agustín Duarte Aké iniciaron una investigación en 2019 y 2020.
Los primeros resultados fueron divulgados el año pasado en el artículo intitulado “Trabajo sexual masculino basado en Internet, etnia y raza: sexualidad maya, hipersexualización y riesgo”, publicado en la revista Estudios Mayas, de la UNAM.
Una ampliación de este texto aparecerá próximamente en forma de libro, bajo los auspicios de la Universidad Autónoma de Yucatán.
Hombres jóvenes ofrecen servicios sexuales
En su estudio, los autores ofrecen un panorama de este fenómeno, caracterizado “por la presencia de hombres jóvenes y no tan jóvenes”, que ofrecen servicios sexuales a otros hombres, en forma independiente.
Es decir que la prostitución masculina en Yucatán se extiende con el Internet hacia los adolescentes.
Al parecer, éstos no son controlados por organizaciones dedicadas a la explotación sexual, sino que ellos mismos escogen a sus clientes y fijan sus tarifas y horarios de trabajo.
Esta es la tercera y última parte de la entrevista que concedió al Diario, para hablar de la trata de personas y la explotación sexual en Yucatán, la investigadora, experta en enfermedades de transmisión sexual y el impacto social de éstas.
Señala que la demanda de esos servicios sexuales procede de extranjeros radicados en la Península, que prefieren hombres jóvenes de la raza maya, y también viene de clientes locales.
En la investigación confirmamos lo que ya habíamos visto en estudios previos, añade la Dra. Vera Gamboa.
“Las redes sociales, a través de ciertas páginas plenamente identificadas, son el medio mediante el cual estos hombres jóvenes y no tan jóvenes, pueden ofrecer sus servicios”.
Prostitución masculina en Yucatán: con rasgos mayas, los más solicitados
Observamos que los chicos se promocionan por medio de fotos suyas que suben a la red, donde, agrega, muestras algunas partes de cuerpo en forma explícita, y en otras no tanto.
Las fotos que atraen más la atención son las de personas de la etnia maya, con la piel más, oscura. Éstas son las más solicitadas, dice la Dra. Vera Gamboa.
El precio de este tipo se servicios sexuales, por lo menos en 2019 y 2020, afirma, oscilaba entre los $300 y $500, hasta los $1,000 y $2,000, dependiendo del tipo de servicio y de lo que éste implique para ellos.
“El precio aumenta si el cliente quiere o no protección, con todo lo que significa eso para la salud del trabajador, en cuanto a la posibilidad de contraer una enfermedad de transmisión sexual”.
Añade que ella y su colega entrevistaron a varios jóvenes dedicados a esta actividad y a algunos de sus clientes, y obtuvieron un panorama muy importante de esta forma de trabajo, que se desarrolla en la clandestinidad y con muchos riesgos.
“Finalmente el encuentro se da en un espacio privado, donde la persona va a llegar con otra que muy probablemente no conoce”.
Contrato de confidencialidad, con y sin protección
Precisamente por esto, señala, detectamos la existencia de clientes que exigen la firma de un contrato de confidencialidad al prestador del servicio y el establecimiento previo de las condiciones del trabajo, como uso o no de protección y consumo de alcohol o de sustancias psicoactivas.
En la investigación descubrimos una mayor demanda de chicos con las características étnicas mayas, dice la Dra. Vera Gamboa, aunque no todos con esas características sean de esa etnia, porque también hay jóvenes indígenas de otros estados, afirma.
“Muchos de estos jóvenes son parte de la población flotante del estado. Viven aquí un tiempo y luego se van a Cancún o a otras áreas de la Península o del país o se quedan en la Península y solo se movilizan alrededor de Yucatán, Cancún o la Rivera Maya“.
Clientes extranjeros y locales de la prostitución masculina en Yucatán
La Dra. Vera Gamboa explica que el servicio de la prostitución masculina en Yucatán hacia otros hombres creció en la pandemia.
Señala que el estudio identificó a por lo menos 500 varones dedicados a ofertar servicios sexuales a otros hombres por Internet.
Añade que un segmento importante de sus clientes son extranjeros residentes en la Península, sobre todo en Quintana Roo y Yucatán y en menor medida en Campeche.
“Aunque también hay clientes locales, por supuesto”, dice.
¿Cuáles son los medios de contacto habituales para el comercio sexual masculino en Yucatán?
El mecanismo habitual, señala la investigadora, es el contacto por correo electrónico o WhatsApp y a partir de allí el cliente y el proveedor se ponen de acuerdo sobre el lugar, hora y costo del encuentro.
“Esto muestra un aparente cambio en el comercio sexual en Yucatán, por la expansión del servicio en las redes sociales, en donde los chicos se convierten en su propio empleador, su propio jefe y por eso pueden fijar sus tarifas”.
Posible explotación de menores por redes de prostitución ajena
¿Trabajar a través de Internet aleja a estas personas de ser explotadas por las organizaciones de tráfico sexual?, preguntamos.
“No lo investigamos, es un pendiente que tenemos y que no sé si podamos hacerlo, porque son temas que a veces mueven muchas cosas socialmente.
“Pero creo que, si hay adolescentes practicando esta actividad, seguramente, al ser menores de edad, existe la posibilidad de que haya detrás una organización, no podemos descartarlo definitivamente”.
Lo que si identificamos es que este grupo de jóvenes trabajadores sexuales está solo, precisa la Dra. Vera Gamboa.
No tienen redes de contención y es excepcional que uno de estos jóvenes diga que conoce a otro que se dedica a lo mismo y le recomiende cómo cuidarse.
“La gran mayoría está solo, afectivamente hablando”.
Jóvenes que ejercen la prostitución vulnerables por soledad afectiva
Según la Dra. Vera Gamboa, esto nos lleva a preguntarnos sobre la vulnerabilidad en la que éstos viven, con incidentes de violencia que, incluso, ponen en riesgo su vida y abuso de sustancias psicoactivas.
“Éstas pueden ser alcohol o cualquier otra droga y las consumen para disociar su cuerpo con lo que sienten, lo mismo que pasa con los trabajadores sexuales mujeres”.
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