La Cuaresma, tiempo de conversión para vivir el triduo pascual, se iniciará mañana con la celebración del Miércoles de Ceniza.
El arzobispo de Yucatán, monseñor Gustavo Rodríguez Vega, celebrará la misa en la Catedral a las 8 a.m., anunció el presbítero Jorge Martínez Ruz, vocero de la Arquidiócesis de Yucatán.
“La recepción de la ceniza en la cabeza significa la humildad de la persona que la recibe y la conversión del corazón, es decir, la disposición de la persona que la recibe para querer convertir su corazón durante la Cuaresma”, explicó de uno de los signos más importantes de esta celebración.
También es tiempo de ayuno y abstinencia: “el ayuno es comer menos teniendo una comida fuerte durante el día y la abstinencia de carne roja o de alimentos que por su confección implique cierto lujo”, abundó el presbítero.
El sentido de estas prácticas es “acercarse a Dios haciendo a un lado lo que nos cause satisfacción o nos impida estar más cerca de Él”.
Este año, “el Papa pidió que ese ayuno y esa abstinencia, las oraciones y los sacrificios que vayamos a hacer los ofrezcamos por la paz mundial, de manera especial por Europa”.
El ayuno y la abstinencia aplican según las circunstancias de las personas y familias, “ya que si únicamente tienen pollo para comer ese día, lo pueden hacer pero cocinando el alimento de manera austera”.
Los viernes de Cuaresma también son de abstinencia de carne, lo que comúnmente la gente llama vigilia.
La abstinencia no solo se refiere a la carne, “uno puede abstenerse de cosas satisfactorias o de realizar actividades placenteras e invertir ese tiempo en alguna persona, apostolado u obra de caridad, lo importante es que lo que hagan los acerque más a Dios”.
Sin indicaciones
Hasta el momento, la Arquidiócesis no ha recibido alguna indicación respecto a la colocación de la ceniza; sin embargo, “cada párroco celebrará la actividad en su templo y la comunidad debe estar atenta a las dinámicas de recepción y distribución de la ceniza”.
Aunque el semáforo epidemiológico de Yucatán está en verde, los templos se mantienen al 75% de su aforo y respetando todas las medidas sanitarias, por lo que es requisito usar cubrebocas.
Además de las misas presenciales, también se harán transmisiones en línea.
