En forma paralela a las actividades abiertas al público, la Cumbre Mundial de Premios Nobel de la Paz desarrollará un programa cerrado, dirigido a jóvenes, conocido como “Liderar con el ejemplo”, en el que participarán 1,000 muchachos brillantes de todas partes del mundo, interesados en la construcción de la paz en el planeta.
Desde su lanzamiento, en 2012, el Programa Juvenil forma parte esencial de la Cumbre. Su objetivo es cambiar la visión de los participantes y animarlos a realizar proyectos de orientación social.
Se trata, pues, de formar a nuevos líderes mundiales en línea con los valores éticos de paz y convivencia.
“Es un programa cerrado, es decir, no habrá acceso para el público. Los participantes —extranjeros, nacionales y locales—, de distintas universidades y organizaciones, se registraron con anticipación”, comenta Raúl Paz, integrante del comité organizador.
Se trata de 1,000 muchachos de 18 a 32 años, estudiantes en su inmensa mayoría, 300 de los cuales vienen de otros países. Una parte del resto viene de otros estados y los demás son alumnos de universidades yucatecas, públicas y privadas.
Actividades
Este año “Liderar con el ejemplo” presentará un nuevo concepto, conocido como Laboratorios de Paz, que buscan fomentar la colaboración entre los jóvenes en proyectos que beneficien a sus comunidades en temas como paz en la familia, desarrollo social, deporte para la paz, culturas indígenas, educación para la paz, desarme nuclear y responsabilidad mediática global.
Además, los muchachos podrán interactuar en 49 talleres con algunos de los Premios Nobel y con académicos y líderes sociales extranjeros y nacionales.
Los jóvenes también tendrán la oportunidad de establecer contactos y colaborar entre sí, lo que propiciará que entablen relaciones de amistad en torno a la construcción de la paz que perdurarán durante muchos años después del evento.
El plan educativo de los talleres, cuidadosamente diseñado, cubre temas relacionados con los derechos humanos, el medio ambiente, la abolición de las armas nucleares, el fin del trabajo infantil, la resolución de guerras civiles, la igualdad para todos, la paz a través de la no violencia y el liderazgo político, entre otros.
Premios
En el marco del encuentro, los muchachos podrán concursar con un proyecto social en una competencia que entregará 10,000 dólares al ganador.
Raúl Paz comenta que se han organizado dos talleres especiales. El primero, “Nuevas aproximaciones a la educación por la paz”, está dirigido exclusivamente a profesores, “porque además de los 1,000 muchachos hay 160 maestros registrados que los van a acompañar en las actividades”.
El otro es un taller para estudiantes de periodismo —30 ó 40 jóvenes—, en el que, más que nada, los participantes cubrirán el evento junto con el equipo de comunicación de la Cumbre.
“Hay que destacar que muchos de los inscritos en el Programa Juvenil son de universidades locales: UADY, Anáhuac Mayab, Modelo… El único requisito de la convocatoria fue que hablen inglés, porque todas las actividades son en ese idioma y porque debido a la dinámica de las actividades, esencialmente prácticas, no se puede contar con traducción”, concluye.