Jorge Abel Charruf Cáceres, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de Yucatán, sostiene que el nuevo contexto mundial coloca al Estado ante grandes oportunidades y hace un llamado a afrontar los retos que plantean esas condiciones y aprovechar las ventajas.
Ese nuevo contexto, subraya, pone a nuestro Estado ante una herramienta inédita, el nearshoring, que puede catapultar nuestra economía hacia un Yucatán industrial.
¿Qué es el nearshoring?
En términos económicos, el nearshoring es la práctica de transferir operaciones comerciales y de industrialización a un país cercano a los principales mercados.
Este mecanismo cobró más notoriedad con los estragos de la pandemia de Covid-19 y los efectos de la guerra entre Ucrania y Rusia en las cadenas de suministro internacionales.
¿Cuáles son los retos y oportunidades hacia un Yucatán Industrial?
En una entrevista, el licenciado Charruf Cáceres advierte que para poder aprovechar de manera efectiva esta oportunidad hay que continuar fortaleciendo y aumentando la oferta de ventajas competitivas.
Competitividad
De esta manera, apunta, Yucatán podrá ser un Estado cada vez más atractivo para la llegada de nuevas inversiones e industrias en busca de acercarse al mercado de Estados Unidos, el más grande del mundo.
“Tenemos que competir con otros países, e incluso con otros estados de México”, añade. “Por lo tanto, consolidar a Yucatán como un Estado competitivo cobra aún más relevancia”.
La seguridad
A continuación señala:
—El gobierno del Estado, en equipo con los empresarios y la sociedad civil, ha hecho grandes esfuerzos por mantener y fortalecer la seguridad de Yucatán, que continúa siendo un referente a nivel internacional y contrasta incluso con la realidad que viven otros estados de la República.
Certeza legal y jurídica
—En nuestro Estado se sigue trabajando también en el fortalecimiento de la certeza jurídica. Estos dos puntos, la certeza legal y la seguridad, son pilares de las ventajas competitivas de Yucatán.
Abasto de gas natural y energía
—También en equipo, y como consecuencia de las constantes gestiones del gobierno del Estado y de la insistencia de los industriales, Yucatán ya cuenta con la certeza del abasto de gas natural para los requerimientos actuales y futuros de procesos industriales.
—Se tiene la misma certeza del abasto de energía para los siguientes 30 años con el inicio de construcción de las dos nuevas plantas de ciclo combinado, en Mérida y en Valladolid.
—Se trata de dos componentes indispensables para que nuestro Estado continúe con su desarrollo económico y la industrialización a gran escala.
Más adelante, el presidente del CCE Yucatán —lo es también de la delegación local de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra)— recalca que la llegada de nuevas inversiones y el dinamismo de la economía yucateca han generado muchos beneficios y nuevos empleos, pero también nuevos retos.
Movilidad y logística
Cita como ejemplo desafíos que han surgido en temas logísticos y de movilidad.
“Nuestro Estado tiene que continuar evolucionando, para que estos retos se transformen en ventajas competitivas”, enfatiza.
Las obras en Progreso, una oportunidad hacia un Yucatán industrial
El líder del sector empresarial menciona un caso particular: la situación en Progreso, donde se tiene un flujo creciente aproximado de 1,400 vehículos de carga y contenedores, que representan casi siete millones de toneladas anuales de carga.
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“Con ese movimiento se propicia un congestionamiento vial en el municipio, que se traduce en más tiempo de traslados y costos logísticos por los tiempos de espera, además del deterioro de las principales arterias del puerto por la cantidad de vehículos de carga que transitan en ellas”, indica.
“El anuncio del gobierno estatal de la obra del viaducto o segundo piso, que irá desde el acceso a la terminal remota hasta el distribuidor vial de la salida del puerto, es una gran noticia. Era una deuda histórica con el municipio de Progreso y, además de impactar de manera positiva en la calidad de vida de los progreseños, elevará la competitividad en temas logísticos de un puerto como lo es el de Progreso, en constante crecimiento de volúmenes de carga resultado de la constante llegada de industrias al Estado”.
Esas industrias, continúa, ven el puerto de altura como la puerta ideal de salida de sus productos a Estados Unidos y el resto del mundo.
Jorge Charruf, también vicepresidente nacional de Comercio Exterior y Asuntos Internacionales de Canacintra, califica la obra anunciada como una gran noticia que se integra de manera natural a la ampliación y modernización del puerto de altura, cubriendo necesidades actuales y futuras tanto de movilidad como de logística.
Esto hace a nuestro Estado mucho más atractivo y competitivo para la llegada de nuevas inversiones ante esta relocalización de industrias en todo el mundo, insiste.
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El dirigente dice que no tiene duda de que esas obras ponen a los industriales yucatecos más cerca que nunca del nearshoring.
“Y, sin duda también, nos acercan de manera considerable al Yucatán industrial”, puntualiza.