MÉRIDA.- Uno de los principales atractivos del zoológico del Centenario en Mérida es la tradicional vuelta en el trenecito, una experiencia que ha capturado la atención de locales y visitantes.
Sin embargo, también se han registrado incidentes, lo cual hace que la regulación y el mantenimiento de estos vehículos sean de vital importancia.
Así es el trenecito del Centenario, en Mérida
La directora de este recinto, Odeisi Mora Camacho, expuso que se trabaja todos los días para ofrecer un servicio de calidad, garantizando la seguridad de los visitantes en todas sus actividades y atracciones, especialmente en las temporadas de mayor afluencia.
La médica veterinaria zooctecnista explicó que actualmente el parque cuenta con dos locomotoras operativas.
El trenecito está compuesto por cinco vagones, cada uno con capacidad para 10 a 12 personas, lo que permite que entre 50 y 60 visitantes puedan disfrutar del recorrido al mismo tiempo.
A lo largo de su historia se han presentado algunos incidentes, el último de ellos en marzo de 2024, cuando se dobló una varilla delantera del vehículo y rompió el cárter, la pieza encargada de almacenar el aceite necesario para lubricar el motor.
Afortunadamente, este daño pudo ser reparado con rapidez.
Plan de revisiones para el trenecito del Parque Centenario
Para evitar que estos incidentes se repitan, Odeisi Mora dijo que el equipo encargado del mantenimiento del tren realiza revisiones constantes.
Estas incluyen inspecciones de las vías, durmientes, engrase de piezas, afinaciones y otras labores necesarias para asegurar el buen estado del vehículo.
Además, el parque cuenta con repuestos como resortes, chumaceras y ruedas, siempre disponibles para reemplazar cualquier pieza defectuosa.
También se informó que cuando el tren no está en funcionamiento, generalmente es debido a reparaciones, ajustes o mantenimiento de las vías, las cuales pueden ser afectadas por el crecimiento de árboles cercanos.
A lo largo de los años, el tren ha tenido varias modificaciones en sus colores y diseño con el fin de hacerlo más llamativo y renovar su imagen.— VANESSA ARGÁEZ CASTILLA