Antonio empezó a fumar a los 18 años de edad. Ahora tiene 56 y la adicción está más fuerte que nunca. Empezó con Marlboro, que hoy día la cajetilla de 20 cigarros tiene un precio de $85. Luego cambió a unos llamados LM, con valor de $63 la cajetilla y ahora, para bajar costos, fuma los llamados Link, que se venden a $30.
Él consume al menos dos cajetillas diarias. Si acude a alguna fiesta o reunión, serían dos y media. Antonio nunca ha intentado dejar ese hábito, pero ya lo piensa. Falta que se decida.
Los mensajes son aterradores para cualquiera. “Secretaría de Salud informa: Inhalar el humo del tabaco es la principal causa de cáncer de pulmón. Ocho de cada 10 personas con esta enfermedad fumaron o convivieron con alguien que fumaba. Contiene polonio 210. Sustancia radiactiva, tóxica y cancerígena. Si quieres dejar de fumar llama al 800-911-2000”.
Otro mensaje: “En México el consumo de tabaco provoca la muerte prematura de 20,000 personas al año por padecimientos cardíacos y 4,000 por accidentes cerebrovasculares. Contiene plomo. Metal tóxico que daña el cerebro, corazón, riñones y otros órganos vitales”.
Uno más: “Las personas fumadoras tienen el doble de riesgo de desarrollar casos severos de Covid-19 y de morir por esta infección. Contiene cianuro. Gas venenoso que destruye el tejido pulmonar”.
Esos mensajes y otros más están impresos en todas las cajetillas de cigarros, sin excepciones.
Se considera que hay tres tipos de fumadores: el leve, quien consume menos de cinco cigarrillos diarios; el fumador moderado, que fuma en promedio de 6 a 15 cigarrillos diarios, y el severo, que fuma más de 16 por día.
Hay opciones en esta ciudad para que los adictos intenten dejar ese hábito, por más grave que sea. El Centro de Integración Juvenil (CIJ) de Mérida cuenta con una Clínica de Tabaco para ayudar a las personas con la adicción a dejar el consumo del cigarro.
Hay sesiones una vez a la semana y se paga una cuota de recuperación de $40, previo estudio socioeconómico. En la actualidad atienden a un grupo de cuatro personas, de las cuales dos ya dejaron de fumar.
Tratamiento contra el cicgarro
La directora del CIJ de esta ciudad, Modesta del Carmen Rivero Cruz, informó que el tratamiento que dan a las personas que desean dejar el cigarro dura tres meses. Se hace la percepción del daño de la adicción al tabaco, se hace una estrategia para interrumpir el consumo y luego se da la fase de mantenimiento de la abstinencia, que incluye técnicas de relajación.
Al mismo tiempo, a la persona se le da un seguimiento mensual una vez que interrumpió el consumo de tabaco, explicó.
La entrevistada afirmó que algunos pacientes presentan dependencia severa y, por tanto, se les dificulta interrumpir el consumo de cigarros. En esos casos el tratamiento puede durar un año.
“Por lo general vienen personas mayores. Los jóvenes casi no porque tienen poca percepción del daño que causa el tabaco. No acuden por decisión personal, no tienen interés”.
Hay casos en que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) remite al CIJ de Mérida a adultos que ya presentan daños, quieren dejar el tabaco y les dan el tratamiento.
La directora del CIJ Mérida informó que en promedio atienden a 15 o 20 personas al año por la adicción al cigarro, a quienes en ocasiones se atiende por grupos o en forma individual.
Al mismo tiempo, dan atención a adolescentes de secundarias por el uso de vapeadores. A estos menores de edad los canalizan al centro. En enero y febrero de este año atendieron a 20, cifra similar al mismo período del año pasado.
Efectividad en un tratamiento
El CIJ tiene un modelo de atención integral en su clínica para dejar de fumar. El tratamiento ha demostrado efectividad por encima de los estándares internacionales y la intervención es grupal con una técnica cognitivo-conductual. Se realiza en 10 sesiones.
Antes de iniciar el tratamiento la persona es valorada integralmente por personal de medicina, psicología y trabajo social y la finalidad es apoyar al interesado para que deje de fumar y mantenerlo libre del uso del tabaco.
El centro indica que el dejar de fumar es un proceso dinámico.
Un amplio marco de investigaciones clínicas ha descrito cinco fases o estados de cambio.
- 1) Precontemplación: piensa en la posibilidad de dejar de fumar.
- 2) Contemplación: piensa seriamente en la posibilidad de dejar de fumar.
- 3) Preparación: se propone dejar de fumar en un lapso no mayor de un mes.
- 4) Acción: intentos por dejar de fumar.
- 5) Mantenimiento: ha dejado de fumar.
Con el Test de Fagerström, uno se puede examinar respondiendo preguntas como cuántos cigarrillos fuma al día; cuánto tiempo transcurre desde que usted despierta hasta que fuma el primer cigarro; ¿le es difícil no fumar donde está prohibido?, y ¿fuma cuando se halla enfermo e incluso en cama?
De acuerdo con un puntaje se demuestra si la dependencia resulta alta, moderada o baja.
Asimismo, se da a conocer que al dejar de fumar las toxinas se empiezan a eliminar, se deja de toser, respirar es más fácil, disminuye el riesgo de un ataque al corazón y el riesgo de cáncer de pulmón se reduce 50%.
Los adictos al cigarro también pueden solicitar ayuda en la Línea de la Vida del gobierno de México.
Al llamar por teléfono una especialista hace varias preguntas, como si es la primera vez que llama, cómo se enteró de ese apoyo, sexo, estado civil, nombre completo (opcional), edad, si es derechohabiente del IMSS o del Issste, municipio y estado en el que vive, domicilio (opcional), preguntan de dónde llamas (si es por celular y si estás en la casa, oficina o la calle).
También preguntan el último grado de estudios, ocupación actual, con quién vive y si ha tenido ideas suicidas. Después el especialista indica que la adicción al cigarro es un problema de salud mental que se tiene que tratar integralmente, al interesado lo debe valorar un psiquiatra y acudir a terapia psicológica.
Posteriormente dan, en el caso de Mérida, tres sitios para acudir a recibir atención. Son los Centros Comunitarios de Salud y Adicciones, ubicados en la calle 116 número 341 con 59 de la colonia Yucalpetén; el otro está en la calle 39-C número 345 entre 2-A y 4 de la colonia Mayapán, y uno más en la calle 94 número 500 entre 187 y 187-A de San Luis Sur Dzununcán.
En la Línea de la vida, que funciona todo el año, informan que otra opción es acudir al CIJ de Mérida y al Hospital Psiquiátrico para recibir atención.
Organismo
El 1 de febrero de este año el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) dio a conocer sus servicios para dejar de fumar en todo el país. El objetivo es brindar atención a la derechohabiencia con problemas relacionados con el tabaquismo.
El Issste dijo que esta atención se brinda en 166 unidades médicas, principalmente en el primer nivel de atención, pero también lo hacen siete hospitales generales.
El programa está dirigido a derechohabientes con problemas relacionados con el tabaquismo mediante un equipo multidisciplinario especializado en prevención, manejo y control de pacientes con dependencia al tabaco.
Se realiza un plan de tratamiento que consta de 12 sesiones con duración de una hora a la semana por tres meses.
El equipo multidisciplinario ofrece pláticas con temas de interés y de daños a la salud por consumo, así como técnicas de afrontamiento y manejo del síndrome de abstinencia.
El Issste informó que con base en las pruebas realizadas y estudios de laboratorio el médico prescribirá el medicamento adecuado al paciente.
Se requiere que el interesado acuda por voluntad propia a solicitar informes a la unidad médica a la que pertenece, que fume como mínimo un cigarro al día y que su problema sea la adicción al tabaco.
Nicotina Anónimos
En el mundo existen asociaciones como Nicotina Anónimos, formada por personas que se ayudan entre sí para tener una vida sin nicotina. Utiliza los 12 pasos y las 12 tradiciones, adaptados de Alcohólicos Anónimos.
En 2021, en el sexenio estatal anterior, un reporte dio a conocer que en Yucatán el 60.3% de los fumadores compra cigarros sueltos, 43 mil personas fuman diariamente y 188 mil lo hacen de manera ocasional.
En un estudio se dio a conocer que a la pregunta de cuál era el cigarrillo más difícil de dejar, los consultados indicaron que el de antes de dormir, seguidos de “algún otro”, cuando está bajo presión y el de después de comer.
Muertes por cigarro
La Comisión Nacional contra las Adicciones calcula que 65,000 mexicanos fallecen al año por causas ligadas al consumo de cigarros.
De acuerdo con la Encuesta sobre tabaquismo en adultos de 2023 que difundieron la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el gobierno federal, en México la prevalencia de consumo actual de tabaco es del 15.3%, que representa a 14.3 millones de personas de 15 años o más. La prevalencia se mantiene sin cambios significativos respecto a las encuestas de 2009 y 2015. El 7.3% (3.5 millones) de las mujeres y el 23.8% de los hombres (10.8 millones) son fumadores de tabaco.
Precios del cigarro
La Secretaría de Hacienda anunció para 2025 el ajuste al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), lo que representa un aumento en los precios de productos como los cigarros.
En el caso de los fumadores, la cuota aplicable al tabaco es de más de 64 centavos por cigarro. Las cajetillas de 14 cigarros aumentarían hasta $8, mientras que las de 20 alcanzarían los $12 adicionales.


