La educación y el adiestramiento canino son dos actividades diferentes que suelen confundirse, de acuerdo con Rashid Cortázar, entrenador canino profesional y embajador de perros guías de Argentina en México.
Con 20 años siendo entrenador canino y tener ya un gran número de perritos en su lista de alumnos, ahora una parte de ellos se ha dedicado a las competencias.
Rashid compartió información sobre la importancia de tener perros educados, esto ayuda a reducir los abandonos porque normalmente este problema se da en cachorros entre los cinco y seis meses de edad.
Respecto a los perros adultos, muchas veces se encuentran en albergues y en el mejor de los casos son devueltos, mientras que otros son abandonados en la calle, les abren la puerta o los dan en adopción.
Lo ideal es que los perros estén adiestrados y educados, para que puedan adaptarse a familias de todo tipo y así no terminen abandonados, explicó.
Necesidades básicas
El entrenador indicó que al adoptar un perrito debemos ser conscientes de todo lo que conlleva: alimento, vacunas, cuidados y saber qué tipo de perro es ideal para ser nuestra mascota.
Es mejor adoptar a un can que sea compatible con el ritmo de vida; por ejemplo, si una persona es activa o no.
Sobre la demanda en servicios de entrenamiento canino, mencionó que siempre ha habido un punto de clientela por así decirlo, aunque años atrás el entrenamiento era visto como un lujo debido al precio.
Rashid refirió que ante la demanda de perros que existe, el entrenamiento es una necesidad. A su decir, la realidad actualmente es que en Mérida hay más perros que personas.
Hoy los perros son la nueva generación de hijos, expuso, por lo que cada uno tiene necesidades diferentes y muchas personas los enfocan en actividades distintas: algunos son perros de trabajo, otros mascotas, unos más concursan, varios son perros de compañía y otros se especializan en búsquedas de narcóticos y explosivos.
Un enfoque positivo
El entrevistado señaló que en Mérida hay una variedad de entrenadores a los cuales pueden acudir para el fin que se busque. Entrenar a un perro siempre debe ser en forma positiva, con mucho amor, cariño, paciencia y no hacerlo como si fuera un maltrato animal.
En cuanto a si la tenencia responsable ha ayudado en la demanda de entrenamiento canino, Rashid dijo que sí, reiterando que la educación ya es una necesidad como parte de tener un perro.
Lo primero que como entrenadores promueven es que un perro debe estar bien alimentado, con su esquema de vacunación en regla y llevarlo a consultas, aunque la educación también es importante.
La educación es diferente al adiestramiento, aclaró. Esto último hace referencia al “siéntate”, “quieto”, “ven”, mientras que la educación es tener un perro tranquilo en casa, que no rompa zapatos ni bolsas de basura, que si se le indica que vaya a su lugar lo haga, que sepa dónde debe hacer sus necesidades básicas.
También resaltó la importancia de verificar que el entrenador esté certificado.