El gobernador Joaquín Díaz Mena supervisó en Dzilam González la operación de los sistemas de riego solar, como parte del programa de Infraestructura Hidroagrícola del Gobierno del Renacimiento Maya, con lo que se impulsan la tecnificación agrícola, el desarrollo sostenible y mejoran las condiciones de vida de las familias productoras, se informa en un boletín.
A través de esta estrategia se implementaron en este municipio 19 sistemas de riego que permiten la tecnificación de 45 hectáreas, con una inversión superior a 2.5 millones de pesos.
El mandatario resaltó que el motivo de su visita al municipio es constatar que los apoyos están llegando a su destino final, de manera directa, a quienes en estas unidades productivas impulsan el fortalecimiento del campo yucateco.
“Esta unidad productiva San Eduardo representa muchas familias que durante años trabajaron con limitaciones, dependiendo del clima para sostener la producción. Este sistema de riego por aspersión con energía fotovoltaica no solo reduce costos, también cuida el medio ambiente y da certeza”, afirmó.
“Significa menos dependencia de combustibles, menos gastos y más estabilidad para planear las cosechas. Eso es justicia para el campo: darle herramientas modernas a quienes históricamente trabajaron con lo mínimo”, sostuvo.
Díaz Mena adelantó que el próximo año, mediante una combinación de recursos, se construirá un nuevo cárcamo para fortalecer el sistema de agua potable, con una inversión de cinco millones de pesos.
Asimismo, informó que próximamente la Secretaría de Educación del Estado (Segey) realizará un levantamiento para rehabilitar, equipar y dotar de internet a la biblioteca municipal, solicitud presentada previamente por el presidente municipal Job Joel Poot Kuk.
En presencia de productoras y productores de ese municipio, el Gobernador recalcó que, de los 100 millones de pesos invertidos este año en caminos sacacosechas, durante 2026 se repetirá la inversión para beneficiar a más productores de todo Yucatán.
Añadió que se destinarán otros 100 millones de pesos a sistemas de riego, con el objetivo de garantizar agua para el campo y que las y los agricultores puedan incrementar sus ingresos y mejorar el bienestar de sus familias.