MÉXICO.- Desde hace semanas la polémica para la familia presidencial no cesa, sobre todo luego de que Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad y Latinus revelaron el posible conflicto de interés con la casa en la que vivieron Carolyn Adams y el hijo del presidente López Obrador, José Ramón López Beltrán, en Houston. Ahora fue precisamente López Beltrán quien exhibió documentos en los que, asegura, se “desmiente la campaña”, en contra de su familia.

En imagen que compartió el hijo mayor del presidente se muestra que la casa se rentó de forma regular a través de un contrato de arrendamiento entre sus propietarios. El documento lo exhibió luego de que la periodista Peniley Ramírez reveló que no fue inscrita la renta de la casa del ejecutivo de Baker Hughes en el registro de propiedades.

“Consulté el historial con tres agentes de bienes raíces. Me dijeron que estos registros les resultan inusuales y no entienden por qué en el sistema nunca se inscribió la renta”, escribió Ramírez en su columna El casero de Houston publicada en El Reforma.

 

El conflicto de interés con Baker Hughes

De acuerdo con el reportaje de MCCI y Latinus, desde septiembre de 2019 a julio de 2020, el hijo y la nuera de AMLO vivieron en una casa en Houston valuada en un millón de dólares, propiedad de Keith Schilling, quien era entonces empleado de la empresa Baker Hughes,  contratista de Petróleos Mexicanos (Pemex).

La primera respuesta de José Ramón López Beltrán sobre el polémico reportaje

El domingo pasado, José Ramón López Beltrán publicó en su primer mensaje que no tenía injerencia en el gobierno de México y que sus ingresos provienen de su trabajo como abogado y asesor en la empresa KEI Partners, fundada por los hijos de Daniel Chávez Morán, asesor honorífico del Tren Maya.

“Latinus” señala contradicciones

El portal de “Latinus” publicó esta noche que los documentos sobre la renta de la “Casa Gris”  contradicen versiones publicadas por Carolyn Adams y Keith L. Schilling sobre la identidad de su contraparte. 

El 4 de febrero, Bloomberg publicó una entrevista con el exejecutivo de Baker Hughes, en la que negaba conocer la identidad de los inquilinos de la mansión en Houston.

Por su parte, el domingo 13 de febrero Carolyn difundió una carta en la que negaba conocer al arrendador, buscando así apagar los señalamientos sobre un probable conflicto de interés al rentar una mansión en Houston al entonces ejecutivo de Baker Hughes, una compañía contratista de Pemex.

Los documentos difundidos por La Jornada están testados y, en el caso del supuesto contrato, no está completo, pues consta de 16 páginas, de las cuales 15 no se hicieron públicas.